Golfito. Una ama de casa sufrió quemaduras graves en la mejilla, espalda, brazo y tórax, todos del lado izquierdo, cuando un sujeto le lanzó un ácido en un aparente lío por celos.
El ataque se produjo la noche de este martes, cuando la mujer caminaba por una acera, a 25 metros de la entrada principal del Gimnasio Municipal en el centro de Golfito, Puntarenas. La mujer acababa de salir del gimnasio tras asistir a una clase de aeróbicos.
El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) informó ayer de que la afectada, quien permanece en la Unidad Nacional de Quemados del Hospital San Juan de Dios, en San José, pidió ayuda a la Fiscalía pues quería denunciar a una mujer que la amenazó.
La víctima es Karol Marchena Obando, de 32 años, madre de tres hijos de 13, 5 y 3 años y quien vive en barrio IMAS en Golfito centro.
Sorprendidos. Alberto Vargas, profesor de aeróbicos en Golfito, dijo que Karol Marchena es una de las 29 personas que todos días llegan a las instalaciones del Gimnasio Municipal para hacer un poco de ejercicios.
Explicó que el trabajo se inició a las 6 p. m. y terminó una hora después. “Karol fue una de las últimas en salir. Ella iba con otras compañeras. Creo que apenas había caminado unos 25 metros en la calle cuando salió un hombre que estaba escondido cerca de la ferretería que le lanzó un líquido. El olor era muy fuerte; creo que era destaqueador de ese que se usa en las pilas o los inodoros.
”El ácido le cayó a ella en la cara, así como a otra muchacha. A Karol se la llevó en su carro una señora que trabaja en el hospital.
”El tipo, que vestía camisa y pantalón negro, salió corriendo hacia el sector de la Municipalidad. No sé qué se hizo; yo no pude verle la cara. Nosotros estamos muy asustados porque nunca habíamos vivido algo así”, narró .
El médico Luis Cordero Corrales, quien la atendió en el Hospital de Golfito, ordenó, debido a la gravedad de las lesiones, su traslado urgente hacia San José.
La mujer fue transportada el martes en la noche en una avioneta del Servicio de Vigilancia Aérea (SVA). Fue internada en el San Juan de Dios.
El jefe de la Unidad Nacional de Quemados del San Juan de Dios, Eliécer Jiménez Pereira, dijo que aunque el estado salud de la paciente es bueno, pues está consciente, desde el punto de vista psicológico está muy afectada.
“Tiene mucho miedo, muy temerosa, se muestra evasiva y poco comunicativa. Eso es normal cuando ocurren este tipo de hechos”, agregó el profesional.
Jiménez dijo que se desconoce el tipo de líquido que le lanzaron, pero explicó que le quemó parte de la cara, la espalda, el brazo y parte del tórax en el lado izquierdo .
“Todavía no le puedo definir el grado de las quemaduras; es decir, su profundidad porque está muy hinchada. Eso se debe a que actúan unas hormonas a nivel de los vasos sanguíneos que dejan salir agua hacia los tejidos, lo que produce la hinchazón” , explicó.
Móvil. Aunque la Policía Judicial no tenía claro el móvil del ataque, se investiga la posibilidad de que el asunto ocurrió por un lío de celos.
Lo anterior, porque la mujer denunció que hace unos días otra mujer la amenazó porque le dijo que le iba a desgraciar la vida.
Francisco Segura, director del OIJ, dijo que es prematuro afirmar que ese sea el móvil, pero que se va a investigar. “Es evidente que el ataque fue contra ella. En la mayoría de los casos cuando hay ese tipo de ensañamiento, tiene que ver con problemas pasionales”, agregó.
El 23 de noviembre del 2011, la educadora Ana Ligia Solís Chaves, de 34 años, fue rociada con un ácido en Santa Gertrudis Sur, de Grecia, Alajuela. El ataque lo ejecutó Arelis López López, condenada en octubre del 2012 a 30 años de prisión. Ella es la compañera sentimental del papá de un hijo de Solís.