El volcán Turrialba incrementó la emanación de gases azufrados y vapor de agua del cráter principal desde el jueves al mediodía.
El aumento en la actividad fumarólica no significa un riesgo eminente de erupción, explicaron sismólogos y vulcanólogos tanto de la Red Sismológica Nacional (RSN) como del Observatorio Vulcanológico y Sismológico de Costa Rica (Ovsicori).
El comportamiento del volcán Turrialba empezó a cambiar desde el 31 de marzo cuando vecinos alertaron a las autoridades sobre “mucho humo saliendo del cráter y vegetación quemada”.
Inmediatamente, la Comisión Nacional de Emergencia (CNE) ordenó aplicar medidas preventivas tendientes a restringir la permanencia de visitantes en ese parque nacional.
El Turrialba es un volcán activo pero su única y última actividad eruptiva ocurrió entre setiembre de 1864 y marzo de 1866. Está situado a 3.340 metros sobre el nivel del mar.
Espectáculo. Mario Fernández, director de la RSN, confirmó ayer que guardaparques y visitantes pudieron apreciar durante los dos últimos días cómo el gas salió del cráter principal o cráter suroeste en forma de columna y que en la parte más alta se formó una especie de hongo.
Paralelamente, Rodolfo Van der Laat, coordinador de Vulcanología del Ovsicori, dijo que esa actividad es normal, solo que en 1996 los gases alcanzaban una altura de dos metros pero ahora la nube llega hasta 40 metros o más.
Precisamente, esas emanaciones fueron observadas ayer en la mañana por decenas de vecinos del centro de Turrialba, quienes llamaron alarmados a la CNE para conocer y si era una erupción y si representaba algún peligro, pues el coloso está 24 kilómetros al noroeste de Turrialba.
Motivado por la duda, Danubio Morales Gutiérrez, coordinador del Comité Municipal de Emergencias de Turrialba, junto al geólogo privado Melvin Salazar, inspeccionaron ayer el volcán donde pudieron determinar que no existe un peligro inmediato.
Sin embargo, Morales dijo que solicitaron tanto a la RSN como al Ovsicori entregar la próxima semana un informe sobre las razones del incremento en la actividad.
El dirigente comunal dijo que esta situación, en vez de afectar al cantón, debería de aprovecharse para incrementar la afluencia de turistas a la región.
“Claro, todo tiene que hacerse siguiendo los parámetros de riesgo, por eso necesitamos los informes de los expertos para elaborar un plan de contingencia. No queremos exponer a nadie”, relató.
Daños. Vecinos de Finca La Central, en Volcán de Santa Cruz de Turrialba, dijeron que en los últimos 15 días plantaciones de papa empezaron a quemarse.
Uno de los afectados es Fabiano Ramírez, en tanto otros agricultores dijeron que estaban tratando de recuperar las matas con la aplicación de agua y químicos.
Para los expertos esto puede deberse a que los gases tienen una alta concentración de ácidos.
En cuanto a la actividad sísmica, la RSN informó de que en los últimos días se ha detectado una cantidad de temblores conocidos como volcano-tectónicos.
Mario Fernández dijo que se trata de señales de unos pocos segundos de duración, de poca energía y de una frecuencia típica de un volcán activo, como son el Poás, el Irazú y el Arenal.
Tanto Fernández como Van der Laat descartaron el lanzamiento de elementos piroplásticos y de lava.
Empero, ambos dijeron que seguirán vigilando el volcán para prevenir alguna erupción.