Una pareja de jóvenes murió de forma trágica la madrugada de este sábado cuando cayeron en su carro al río María Aguilar, a su paso por San Francisco de Dos Ríos.
El accidente fue reportado a las autoridades cerca de las 4 a. m.
El vehículo se dirigía en sentido Zapote - San Francisco de Dos Ríos y se precipitó al cauce a un costado del puente, localizado cerca del motel Cascada Azul.
Las víctimas fueron identificadas como Paola María Romero Sáenz, de 28 años, y Gerardo Chavarría Quirós, de 22, según confirmó el Organismo de Investigación Judicial (OIJ). El joven era el conductor del automóvil Nissan Sentra.
Aunque la Cruz Roja envió unidades al lugar, cuando los socorristas llegaron hasta donde los jóvenes, ya ambos estaban sin vida. Poco después, el vehículo fue sacado del río y los daños eran visibles.
Los agentes del OIJ hicieron el levantamiento de los cadáveres y los trasladaron a la morgue.
De acuerdo con las autoridades, una de las posibles causas del accidente es que Chavarría se haya quedado dormido al volante, ya que no fue posible encontrar huellas de frenado en la carretera.
Salida nocturna. Hace tres años, Paola Romero obtuvo su título como abogada y desde entonces trabajaba en el Poder Judicial, según contó ayer su madre, Seily Sáenz.
En febrero del 2011, fue nombrada como técnica judicial 1 en el Juzgado Especializado de Cobro, en el Segundo Circuito Judicial, en el cantón de Goicoechea. Luego pasó a desempeñarse como jueza de cobros en ese mismo lugar.
Gerardo Chavarría estaba estudiando Derecho y también laboraba en los Tribunales de Goicoechea, donde desde hace un año ocupaba un puesto como asistente legal. La pareja se conoció en esa institución el año pasado y tenía planes de contraer matrimonio en el transcurso del 2015.
Última llamada. Sáenz recordó que habló con su hija por última vez la noche del viernes, cuando la joven le dijo que saldría con su novio y que pasarían la noche fuera.
“A las 9 de la noche envió un mensaje a la familia deseándonos buenas noches, diciendo que estaba bien y que nos amaba mucho (...). Yo lo quiero sentir como una despedida”, expresó la madre.
Para Sáenz, lo que le sucedió a su hija podría alertar a otros jóvenes sobre los peligros de conducir a altas horas de la noche.
“No tengo idea de dónde andaban, de dónde venían, si tomaron o no licor, pero uno sabe que a esas horas la calle es más peligrosa. Solo espero que este caso haga que la gente joven aprenda a medir los peligros”, manifestó.
Los servicios fúnebres de los jóvenes se realizarán por separado. El de Romero será en el camposanto La Piedad (Desamparados) y el de Chavarría, en Goicoechea.