La poca pericia del chofer, el exceso de velocidad y la falta de una valla divisoria en el centro de la carretera, fueron algunas de las causas que propiciaron el choque de un automóvil con un camión, que dejó cinco jóvenes muertos.
El accidente ocurrió el miércoles, a las 8:55 p. m., en San Diego de La Unión, en la autopista Florencio del Castillo, que comunica Curridabat con Cartago.
Los fallecidos eran cinco amigos vecinos de las urbanizaciones Tirrá 1 y Tirrá 2, en Dulce Nombre de La Unión, Cartago.
El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) los identificó como Mauricio Alonso Calderón Villalobos, de 20 años; Josept Alonso Chaves Allen, de 22; Steven Brizuela Alcázar, de 17; Diego Armando Calderón Sanabria, de 21 y Gabriel Fuentes Ospina, de 16.
La Policía Judicial informó de que la identificación la hicieron familiares por la ropa, las tenis y los tatuajes. Asimismo, el informe oficial dio cuenta de que los muchachos fallecieron debido a los múltiples golpes que recibieron cuando el vehículo impactó de costado con el camión.
Salida de noche. Omar David Vargas Retana, un amigo de los fallecidos, dijo que el miércoles, en la noche, conversó con ellos como generalmente lo hacían en algunas de las aceras en Tirrá.
“Algunas veces estábamos aquí (Tirrá 1) otras veces allá(Tirrá 2). Anoche me invitaron a que fuéramos a dar una vuelta, ya que Mauricio estaba estrenando carro (...). No ve que tenía dos días de tenerlo. No sé porque no me monté, pero hoy estoy vivo” , manifestó.
Jéssica Calderón Rojas, tía de Diego Calderón, contó: “Mi sobrino estaba jugando play . En eso vino uno de sus amigos y le dijo que fueran a dar una vuelta en el carro que habían comprado”.
Los jóvenes salieron de Dulce Nombre pasaron por Tres Ríos y siguieron por la Florencio del Castillo hacia San José.
Cuando habían recorrido cuatro kilómetros, el auto se salió de la carretera, pasó la medianera (que no tiene valla de protección) e invadió el carril contrario (sentido Curridabat hacia Cartago), donde se toparon con un camión.
Diego Herrera, jefe de la Policía del Tránsito en San José, comentó que hubo “un posible exceso de velocidad por parte del automóvil, que era un Honda modelo 1993, lo cual causó al chofer la pérdida de control del carro y que se generara la invasión del carril”. Añadió que cuatro ocupantes tenían los cinturones puestos, mientras que un quinto salió expulsado.
Héctor Chaves, director del Cuerpo de Bomberos, dijo que el carro chocó con el costado izquierdo de la parte frontal del camión.
“El vehículo liviano fue arrastrado 40 metros y se produjo el incendio por el rompimiento del tanque del combustible del Honda. La fuente de ignición que originó el incendio fueron las chispas generadas por el roce entre partes de metal de ese carro con el pavimento”.
Chaves expresó que el fuego se inició en la parte trasera del automóvil, cerca del tanque del combustible y, de ahí, se extendió al camión. Las autoridades no dieron a conocer el nombre del chofer.
Guillermo Loría, del Laboratorio Nacionales de Materiales y Modelos Estructurales de la Universidad de Costa Rica (Lanamme), dijo que estas muertes se pudieron evitar si la Florencio del Castillo contara con vallas divisorias.
Esta nueva tragedia vial causó gran conmoción en las urbanizaciones Tirrá, donde habitan familias de clase media baja. Los familiares y amigos se organizaban para velar los cuerpos anoche.