Como un héroe. Así recuerdan los familiares a Alexander Mora Vargas, el chofer del bus que cayó el jueves a un guindo en Cinchona, Alajuela. Una tragedia que cobró la vida de 12 personas, incluido el conductor.
A él lo velaron este viernes en un salón comunal en Llorente de Tibás, cantón en el cual vivió desde pequeño.
Carlos Gutiérrez, tío de Mora, manifestó que si su sobrino no hubiera maniobrado el bus la tragedia pudo haber sido peor.
"Mi sobrino fue un héroe hasta el final. Él bien pudo haber optado por lanzarse del autobús, pero nunca lo abandonó. Si él no hubiera maniobrado hubiera caído en un guindo peor y no habría ningún sobreviviente", dijo Gutiérrez.
La misma opinión manifestó Sandra Ulloa, prima de Mora: "Él hasta los últimos momentos trató de hacer lo que pudo. Según nos hemos enterado, él le dijo a todas las personas que se ecomenadaran a Dios antes del accidente. Fue algo muy lindo de su parte", comentó.
Mora tenía más de 20 años de manejar buses y camiones, y desde niño soñaba con ser chofer, dijo su tío.
Al chofer, quien era padre de una joven de 16 años, lo recuerdan como un fiel aficionado al equipo de Alajuelense, a pesar de que vivía en las cercanías del estadio Ricardo Saprissa junto con su madre.
"Era un chavalazo, disculpe la expresión, siempre anheló ser chofer desde niño, murió en lo que a él le gustaba", agregó Gutiérrez.
La mamá de Alexander tenía un mal presentimiento sobre el viaje de su hijo.
"La mamá nos comentó que ella sentía que algo le iba a pasar el día siguiente. De hecho, como a las 8 a. m. de ayer (jueves), llamó a una hermana y le dijo que algo le había pasado a Alexander, pese a que a esa hora no había pasado el accidente", enfatizó
Mora será sepultado este sábado en el cementerio de Tibás.
Falla mecánica. Los sobrevivientes de esta tragedia contaron a los socorristas lo qué ocurrió minutos antes del accidente.
LEA: Falla en bus causa la peor tragedia vial en 30 años
Según los diferentes testimonios dados a los paramédicos, Mora no pudo compresionar mientras descendía por la zona, lo que provocó que el bus (placa SJB12503) se desestabilizara.
El conductor invadió el carril contrario para intentar chocar el vehículo contra el paredón izquierdo y así evitar una tragedia. No obstante, en esa maniobra, se encontró con una alcantarilla que lo hizo perder de nuevo el control y caer al guindo.
La huella de frenado que hay en el sitio es de unos 100 metros, aproximadamente.
Inicialmente, la Policía Judicial se presume que podría tratarse de un problema en la dirección del bus o que se haya trabado o quebrado alguna rótula
El autobús quedó destruido y sin techo sobre una calle paralela, la cual es la entrada a la planta hidroeléctrica El Ángel.