Tárcoles (Garabito). “Fue impresionante ver a más de 20 cocodrilos despedazarlo. Un macho dominante lo tenía y le daba vueltas en el agua. Los demás alrededor esperaban para arrancarle partes del cuerpo...
”Más triste aún es el hecho de verse imposibilitado de ayudar. Con la embarcación no se podía uno acercar a los animales y tratar de ahuyentarlos, porque pegaba (en el fondo), y la Policía Turística y otra gente gritaban, pero ya no había nada que hacer (...)”.
Así describió Jorge Matamoros Hernández, un cruzrojista de Jacó de Garabito, Puntarenas, lo que observó desde una lancha cuando el martes respondieron a un llamado porque un hombre fue atacado por un cocodrilo cerca del puente sobre el río Tárcoles, en la carretera Costanera.
Los socorristas salieron de Jacó a las 4:30 p. m. y 15 minutos después, un grupo que incluía a Matamoros llegó a Playa Azul. Allí abordaron una lancha para recorrer el río desde la desembocadura hacia el interior. Otros se fueron para el puente.
Nadie pudo hacer nada pues los cocodrilos en poco tiempo ahogaron y luego desmembraron a Omar de Jesús Jirón Romero, de 32 años, un peón de construcción, quien bajo los efectos del licor, se metió al Tárcoles para bañarse.
Aunque ayer personal de la Cruz Roja, la Fuerza Pública y voluntarios rastrearon los ocho kilómetros desde el puente hasta la desembocadura, no encontraron restos de Jirón.
Fiesta trágica. Omar de Jesús Jirón, un nicaragüense quien, al parecer, vivía en San José, trabajaba desde hacía un mes en la construcción de la nueva Clínica de Salud en Parrita. Al igual que otros peones, vivía entre semana en un contenedor y, ocasionalmente, viajaba a San José, dijo Léster Pérez, compañero de trabajo.
El fin de semana anterior, luego de que recibieron el pago, Omar de Jesús Jirón y Víctor Brenes Martínez, entre otros, “se fueron de fiesta”, dijo Pérez, y el lunes llegaron a trabajar después de las 11 a. m.
Pérez agregó que, debido a que el estado de los peones era “grave”, no podían laborar, por lo que el jefe les dijo que se fueran. El martes volvieron ebrios y fueron despedidos.
Precisamente, Víctor Brenes dijo que ese martes, “después de tomarse unas cervezas”, abordaron un bus en Parrita para que los trasladara a San José.
Debido al escándalo y a que tomaban en el bus, el chofer, con la ayuda de la Policía Turística, los bajó poco antes de las 3 p. m. en el puente del Tárcoles, en la carretera Costanera.
Ronny Muñoz Barquero, un comerciante en el puente, los recordó muy bien ayer: “Desde que los dos hombres llegaron, los tuvimos que ayudar porque uno de ellos (el que murió) estaba muy tomado y se le quería tirar a los carros. Lo ayudamos a que se recostara en el zacate, a la orilla de la calle”.
El acompañante de Jirón, Víctor Brenes, dijo que cuando su amigo se recuperó un poco, le pidió que le cuidara las maletas “mientras iba a comprar más guaro. Luego me dijo que bajáramos al río. Yo no sé por qué le hice caso. Bajamos y me dijo que volteara la cara porque se iba a quitar la ropa para bañarse un rato en el río. Al momento volví a ver y ya no estaba, lo llevaba un cocodrilo río abajo”.
Dagoberto Vásquez, un cuidacarros, también los vio bajar al río. “Les dije que no lo hicieran, porque eso está lleno de cocodrilos. Lógicamente, no me hicieron caso. Al momento lo vimos cuando varios cocodrilos se lo iban comiendo”. Colaboró la periodista Wanda Araya .