Nelson Enrique Sánchez Ureña, un individuo de 31 años, quien previamente había sido condenado a 18 años de prisión por causar la muerte de Allison Bonilla en 2020, recibió, la tarde de este jueves, la pena máxima por homicidio, que asciende a 35 años, casi el doble de la sentencia original que le fue impuesta.
“Usted la consideró como una cosa... es un hecho atroz. Actuó bajo seguro, con alevosía y la usó como un objeto desde que la abordó hasta que la lanzó. No ha tenido remordimiento, y eso fue tenido en cuenta al momento de imponerle la pena, porque acabó con la vida de una persona que tenía toda una vida por delante”, dijo la jueza Carmen Ureña al explicar el fallo, en el cual se modificó el delito de homicidio simple a calificado.
Ureña subrayó que él se aprovechó de la confianza que existía con Allison, quien era su vecina y a quien conocía desde hace muchos años.
El hombre la agredió físicamente para trasladarla hasta un vehículo y luego la arrojó en un basurero. Dado que se utilizaron varios escenarios y hubo una planificación, se aceptó la tesis presentada por el defensor de la familia de la víctima, Rodrigo Araya, quien solicitó la pena máxima para Sánchez, alias Sukia.
La jueza le dejó claro que ni él ni nadie en este país tiene la capacidad de decidir el destino de la vida de otra persona.
El representante del Ministerio Público, José Rodolfo Mora García, también pidió la recalificación de los hechos y durante casi una hora expuso todos los argumentos desde el momento en que Sánchez interceptó a Allison, abusó de ella y le causó la muerte.
La abogada de Sukia, Angel Batres López, rechazó en el juicio el pedido de los 35 años solicitados por la parte querellante y el Ministerio Público, argumentando que su cliente es una persona joven y sin antecedentes, por lo que urgió una pena más acorde.
Araya respondió a ese argumento al expresar que Sánchez es una persona cobarde.
“Se aprovechó de todas las circunstancias coyunturales de la víctima, cometió una monstruosidad con Allison, era vecino, la conocía desde niña, aquí no estamos en presencia de un sujeto extraño que aborda a Allison y la asesina. Es un sociópata porque la conducta posterior al delito trata de limpiar su vehículo donde quedó gran cantidad de sangre de Allison”, alegó.
Añadió que ya lo ha visto en los juicios anteriores y sus ojos son completamente vacíos, sin ningún tipo de emoción, no muestra ningún tipo de arrepentimiento y es una persona que no tiene ningún tipo de empatía y no se muestra arrepentida.
El debate se llevó a cabo este jueves a la 1:30 pm en la sala de juicios N.º 1 de los Tribunales de Justicia de Cartago.
El Tribunal estuvo compuesto por las juezas Kathya Vega Brenes, Carmen Ureña Ureña (quien presidió) y Saillyn Ballestero Mora.
Ya en dos ocasiones se había denegado aumentar la pena contra Sukia, pero al final el Tribunal de Casación ordenó un nuevo juicio, al estimar que era válida la solicitud de la Fiscalía y el defensor de la familia, por lo que este jueves se dictó el fallo definitivo.
La mamá de Allison se mostró alegre al escuchar el veredicto, después de recibir el abrazo de su madre, sus hermanas, familiares y amigos.
“Yo sé que está al lado de papá Dios y sabía que hoy se iba a hacer justicia. Estoy feliz porque sé que ese hombre no va a salir ahora. No le pusieron más años porque no se puede, pero esa persona se merecía más años”, declaró Yendry Vásquez, progenitora de Allison.