El decomiso de marihuana por parte de los diferentes cuerpos policiales del país durante el año pasado, aumentó un 100% en comparación con el 2015, según cifras del Instituto Costarricense sobre Drogas (ICD).
Hasta noviembre del 2016, se habían decomisado 11.925 kilos de picadura de marihuana, mientras que en todo el 2015 las autoridades se incautaron de 6.000 kilos, casi la mitad.
El año en que más picadura de cannabis se ha confiscado es el 2014, cuando la Policía se apropió de 12.005 kilos. No obstante, el 2016 podría superar esa cifra cuando se incluyan los datos de diciembre, según Guillermo Araya, director del ICD.
“Evidentemente, hay una labor más eficiente, más capacidad y un fortalecimiento de la cooperación internacional para interceptar ciertos decomisos”, agregó Araya.
El 2016 fue uno de los años en que los cuerpos policiales más han golpeado al narcotráfico en confiscaciones de droga.
Incluso, si los decomisos de diciembre llegaran a más 80 kilos, se superará la cifra más alta de los últimos 16 años.
“Costa Rica tiene un consumo; ya la marihuana posee un mercado aquí, es más, muchas de las luchas del crimen organizado son para posicionar no solo crack o cocaína, sino también marihuana. Antes, la lucha era por cocaína y crack ”, comentó Guillermo Araya.
Trasiego en Limón
De acuerdo con los registros del ICD, en noviembre del 2016 se decomisaron 101 kilos de la hierba. De estos, 77,5 kilos fueron confiscados en Limón. Esta provincia es una especie de centro de logística, pues aquí llega la mayoría de embarcaciones con la droga procedente del Caribe; además, tiene dos cantones con alta producción (Siquirres y Talamanca).
Además de la hierba importada que se retiene, las autoridades detectaron grandes cantidades de plantaciones en el país.
Entre el 19 y el 23 de diciembre pasados, oficiales de la Policía de Control de Drogas (PCD) destruyeron 206.698 matas de marihuana, cuya siembra fue camuflada en manglares y montañas de los cantones de Osa y Quepos, en la costa pacífica, al sur del país.
Para las autoridades, el sistema de cultivo en manglar es muy novedoso y es una prueba más de cómo el narcotráfico evade la vigilancia policial.
A la fecha, la Policía no ha logrado dar con l os responsables de estas siembras. Con esas plantas destruidas, fueron más de 2,1 millones las matas arrebatadas al narco en el año recién pasado.
Durante el 2015, se habían erradicado 1,7 millones de arbustos de cannabis.
Paralelamente, el año anterior fueron confiscadas 21 toneladas de cocaína, 21.000 piedras de crack y 1.461 dosis de éxtasis.