El próximo 6 de noviembre, la jueza Rosa Elena Gamboa se sentará ante el Tribunal Penal de Goicoechea, pero no como imputada.
Ella irá en calidad de querellante, pues demandó al periodista Nicolás Aguilar por delitos contra el honor, a raíz de publicaciones hechas en el 2010 en La Nación.
Las noticias informaron sobre supuestas presiones denunciadas por los jueces del Tribunal Penal de Limón.
Se dio a conocer que los jueces indicaron que la colega Gamboa los presionó para agilizar un juicio por tráfico internacional de drogas, en el que estaban acusadas siete personas, entre ellas, una exjueza.
La situación originó una causa disciplinaria contra la funcionaria, la cual luego fue declarada sin lugar.
En su demanda contra el reportero, la jueza argumentó que se publicaron hechos falsos.
“Nunca traté de intervenir en forma alguna ni mucho menos presionar a ningún juez para que resolviera en una forma determinada en un plazo determinado”, dice la querella.
Además, adujo que se dañó no solo su imagen, sino la del Poder Judicial.
También dijo que la situación le causó problemas de salud como hipertensión y la obligó a tomar medicamentos.