Nueve días después de que narcos amenazaron con atacar las instalaciones del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) de Limón, esa misma Policía desarticuló, este miércoles, una organización que quemaba y descuartizaba a sus víctimas.
Las autoridades detuvieron a cuatro personas, en 12 allanamientos simultáneos realizados en Limón. Específicamente, los operativos fueron en viviendas ubicadas en barrio Los Lirios, Limoncito, Río Banano y Moín.
Los apresados son de apellidos Brautigam (45 años), Salazar (27), Martínez (26) y Salazar (23). A ellos se les vincula con cuatro asesinatos.
Además, estos presuntos cabecillas tienen antecedentes por otros homicidios, robo y trasiego de drogas, informó el OIJ.
Las autoridades también investigan si están vinculados con las amenazas recibidas por los funcionarios judiciales de la delegación caribeña.
El OIJ comunicó que el supuesto líder de esta agrupación criminal, de apellido Brautigam (primo de Brautigam, arrestado este miércoles), fue aprehendido el 4 de junio en Panamá, debido a una orden de captura internacional por homicidio y violación.
La Fiscalía confirmó que Costa Rica pidió la extradición de Brautigam para juzgarlo aquí por esos delitos.
En los allanamientos, decomisaron municiones de varios calibres, dos rifles, una pistola de 9 milímetros, una escopeta y celulares.
Dinámica. Gerald Campos, director interino del OIJ, detalló que los asesinatos ocurrieron en el 2013.
Las víctimas fueron Aarón Retana Retana, de 22 años; Jeffrey Gómez Amador, de 20; Jorge Ellis Ugalde, de 23; y José Luis Monestel Avilés, de 19.
De ellos, el único que no tenía antecedentes era Gómez; los demás afrontaban una causa por robo o por tentativa de homicidio.
Según el jefe policial, dos de esos hombres fueron quemados, uno fue descuartizado y del otro solo se hallaron sus restos óseos.
“Las personas fallecidas se convirtieron en rivales de estas organizaciones. Son grupos violentos que no solo atemorizan a bandas rivales, sino que ejecutan a personas que se oponían a lo que ellos querían”, dijo Campos.
Celso Gamboa, fiscal adjunto, amplió: “Son ajusticiamientos producto de actividad criminal de narco que, en este momento, tiene en vilo a Limón”.
La banda también se dedicaba al trasiego nacional de drogas. “El grupo busca posicionarse en el país, para tener a cargo la cultura de la droga”, aseveró Campos.
Según el jefe del OIJ, el grupo ingresaba la mercancía a Costa Rica por vía marítima y luego la movía en vehículos.
Tranquilidad. Gustavo Mata, ministro de Seguridad, aseguró que los allanamientos dan un poco de tranquilidad a los limonenses.
“Falta mucho por hacer, pero realizamos trabajos importantes que van a quebrar estructuras criminales y a llevar la paz que necesitan”, señaló.
El ministro sostuvo que los operativos incidirán positivamente en la cantidad de asesinatos en la zona.
“Estos golpes van a verse reflejados en una disminución importante de los homicidios que se han venido dando, desde hace un año, de forma atípica en esa provincia. Digo atípica porque las bandas son las que se están matando entre sí”, expresó.
Campos añadió que estos golpes también son un respiro para los funcionarios judiciales.
“Vamos a continuar entrando fuerte a la zona (...). Es una situación que no vamos a permitir”, mencionó el jefe del OIJ.