El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) halló ayer 330 kilos de cocaína cerca de donde se estrelló una avioneta el domingo en Bebedero de Cañas, Guanacaste.
Las 18 pacas habían sido tiradas en un matorral, en Lajas de San Miguel, Cañas.
Las autoridades descubrieron la cocaína a unos 20 minutos, en vehículo, desde el punto donde ocurrió el accidente de la aeronave, marca Cessna, de colores blanco con rojo.
Por eso, se analizaban ayer los indicios levantados en ambos sitios para determinar si esa droga tiene relación con la aeronave, que llevaba matrícula falsa.
Francisco Segura, director del OIJ, señaló que los vecinos lanzaron la alerta de que una aeronave intentó levantar vuelo, pero cayó al suelo, a eso del mediodía.
Cuando los agentes de la Fuerza Pública y del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) llegaron al sitio, no encontraron a sus ocupantes, por lo que comenzaron un rastreo de inmediato.
Perros adiestrados hallaron restos de droga en el aparato, añadió el jefe policial.
En el sitio también fue localizado un camión de carga liviana, en cuyo cajón había varias pichingas vacías para combustible, así como una bomba usada para el trasiego del hidrocarburos.
“Todo indica que es una avioneta de narcotráfico en una pista que no es oficial, de zacate, en la que puede aterrizar una aeronave. Ahora hay que tratar de determinar quiénes eran las personas. Se puso una alerta en los hospitales para tratar de saber si llega alguien politraumatizado, porque alguna consecuencia física tuvo que haber tenido”, dijo Segura.
Ocupantes. Según dijo el ministro de Seguridad, Celso Gamboa, los vecinos comentaron que al menos dos o tres sujetos se alejaron del lugar del percance en un vehículo.
Gamboa agregó que la Fuerza Pública colocó retenes para identificar a personas y vehículos y, una vez que el OIJ analice huellas o elementos pilosos en la aeronave, tratarán de verificar si hay coincidencias con las personas que estuvieron cerca del lugar.
La avioneta estrellada en Cañas portaba una calcomanía con una matrícula falsa estadounidense.
La Policía Judicial señaló que la aeronave no llevaba el sistema de posicionamiento global, conocido como GPS, que hubiera permitido revelar la ruta que seguía el avión.
“Posiblemente, era droga que estaba saliendo del país, el cual están usando como bodega y se están haciendo trasiegos de todo tipo. En esos sectores de Guanacaste hay mucho espacio y fincas para fumigar. Aquí lo que está sucediendo es que no hay un control de parte del Gobierno de los aviones que vuelan a bajas alturas”, declaró Segura.
Por su parte, Gamboa reconoció que Costa Rica ha sido una ruta de tránsito del narcotráfico y las aeronaves ingresan sin ser detectadas.
“El país no puede soslayar que está viendo helicópteros que pasan por aire; la ciudadanía lo reporta. Nuestros equipos no tienen capacidad de interdicción aérea. Costa Rica no puede derribar un avión, aunque lo quisiera, y esté legitimada para hacerlo. Nuestros helicópteros no tienen esas capacidades”, afirmó.
Otro caso. El domingo 24 de agosto, una avioneta narco, con matrícula falsa y pilotada por un mexicano, fue interceptada por el OIJ en el aeródromo Las Piedras, en Bebedero de Cañas, cuando varios sujetos pretendían cargar 400 kilos de coca. Esa vez se detuvo a tres ticos y a un mexicano. Además, se capturó a un ingeniero agrónomo, de 34 años, que habría coordinado el ingreso del avión a la arrocera Ranchos Horizonte.