El Ministerio Público dio por agotada la investigación del atentado de La Penca, ocurrido en mayo de 1984, luego de que las autoridades judiciales de Argentina confirmaron la muerte del sospechoso de perpetrar el hecho.
Jorge Chavarría Guzmán, fiscal general de la República, dijo que esa decisión no implica el cierre del caso, pues todavía está pendiente determinar quiénes idearon el atentado.
“Hay autores intelectuales, sobre los cuales, el caso queda abierto, pero a nivel de Costa Rica ya es imposible avanzar. Corresponde a otras instancias establecer responsabilidades, pues los posibles sospechosos estarían fuera del país”, afirmó Chavarría.
El jefe del Ministerio Público agregó que si en el futuro una autoridad extranjera obtuviera algún tipo de información, la Fiscalía estaría reabriendo el caso “para impedir que el velo de la impunidad caiga sobre estos hechos”.
Hechos. En el atentado de La Penca se hizo estallar una bomba durante una conferencia de prensa citada por el entonces guerrillero Edén Pastora Gómez, quien combatía al gobierno de Daniel Ortega, del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN).
En el ataque hubo 7 muertos y 27 heridos. Como responsable del hecho se señaló al falso periodista Per Anker Hansen, que se infiltró y viajó a la zona entre los reporteros.
El fiscal Chavarría explicó ayer que en aquel momento Hansen vivía en Panamá. Luego de una investigación realizada por periodistas del diario Miami Herald de Estados Unidos se determinó que su verdadero nombre era Roberto Vital Gaguine.
Durante las pesquisas se supo que Vital había fallecido en el asalto que realizó un comando armado al cuartel militar de La Tablada en Argentina. Empero, debido a que nunca se tuvo confirmación de su muerte, el Ministerio Público giró, en el 2008, una orden de captura contra Roberto Vital.
Chavarría dijo ayer que la Oficina de Relaciones Internacionales del Ministerio Público de Argentina confirmó, el 15 de noviembre, que unos restos óseos guardados desde de 1998 correspondían a los de Roberto Vital Gaguine.
“Ellos hicieron las pruebas de ADN hasta ahora y con esto estamos levantando la orden de captura internacional, que se había girado”, anunció Chavarría.
Reacciones. Dos de las víctimas, los periodistas Nelson Murillo (quien laboraba en canal 6) y José Rodolfo Ibarra (que estaba en el 7) dijeron que la confirmación de la muerte de Vital cierra un capítulo del proceso. Sin embargo, se mostraron esperanzados de que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos admita una queja presentada desde el 2008 por el Colegio de Periodistas y se investigue el por qué Nicaragua y Costa Rica, entre otros, nunca realizaron una buena investigación del caso.