Un director de colegio quien también funge como profesor de inglés envió las respuestas de dos exámenes de bachillerato a varios alumnos a través de mensajes en WhatsApp, para que ellos las vendieran a otros compañeros en cinco centros educativos limonenses.
La situación quedó al descubierto cuando una madre avisó sobre la irregularidad a las autoridades de uno de los colegios y estas hicieron la denuncia.
Ayer, la Fiscalía de Limón detuvo al docente, de apellido Acevedo, quien dirige la secundaria privada Gilander, ubicada en Batán de Limón.
También se apresó a un delegado del Ministerio de Educación Pública (MEP), de apellido Zapata, quien era el encargado de trasladar los paquetes con los exámenes desde la Fuerza Pública, hasta dicho centro.
Según la pesquisa del Ministerio Público, Zapata recogió más temprano de lo usual las pruebas de Español y Matemáticas (aplicadas el 4 y 5 de noviembre) y las llevó al colegio Gilander, donde Acevedo resolvió las preguntas.
Luego, a través de la aplicación WhatsApp , el director habría enviado las respuestas a estudiantes de su mismo colegio, del Colegio Experimental Bilingüe de Siquirres y de los liceos de Venecia, Matina y Cuba Creek, también en Matina.
La investigación también reveló que, al parecer, los alumnos compartieron la información con otros compañeros a cambio de ¢10.000 y hasta ¢35.000. La Fiscalía dijo que se investiga cuánto dinero habrían recibido tanto el profesor como el delegado.
Pruebas. Las autoridades allanaron ayer los cinco centros educativos y decomisaron teléfonos celulares. Aunque no se detalló la cantidad total de aparatos incautados, solo en uno de los colegios hallaron 14.
La Fiscalía recopilará la información contenida en los dispositivos para determinar cuáles menores se beneficiaron. Serían acusados del delito de penalidad del corruptor, cometido por quien “ofrezca o prometa a un funcionario público una dádiva o ventaja indebida”.
A los adultos se les achaca una concusión, que se refiere “al funcionario público que, abusando de su calidad o de sus funciones, obligare o indujere a alguien a dar o prometer indebidamente, para sí o para un tercero, un bien o un beneficio patrimonial”.
No se descarta que la misma anomalía haya ocurrido con otras pruebas de bachillerato.
Sin cambios. A pesar de la situación, la ministra de Educación, Sonia Marta Mora, adelantó ayer que las pruebas seguirán como estaba previsto. Mañana terminan, con Cívica. Los resultados estarán el 28 de noviembre.
Mora indicó que en los próximos dos días valorarán el informe de la Fiscalía para decidir si deben tomar alguna acción.
“Esto por ahora es una presunción, debemos esperar la investigación y nos vamos a mover rápidamente”, expresó la ministra, quien no descartó iniciar un proceso disciplinario.