Este fin de semana la Fuerza Pública atendió 53 incidentes relacionados a fiestas y locales que irrespetan el aforo máximo dispuesto por el Ministerio de Salud, para frenar la propagación de la covid-19.
La Policía recibió la alerta de una fiesta clandestina en una vivienda ubicada en Herradura, cantón de Garabito, Puntarenas. Al llegar las unidades policiales, decenas de personas intentaron escapar de la escena.
La Fuerza Pública constató que había más de cien personas y gran cantidad de licor, así como algunos destrozos en el interior del inmueble.
Al parecer, la casa es rentada para uso vacacional, pero la persona que la alquiló la usó con el fin de desarrollar una actividad que aglomeró a gran cantidad de gente.
La acción policial permitió suspender la fiesta, donde la mayoría eran jóvenes.
Llenazo en bar
Mientras tanto, en un bar ubicado cerca de la terminal de buses Caribeños, en San José, la Fuerza Pública se llevó una sorpresa cuando ingresó y detectó que el lugar estaba lleno.
Sin ningún respeto por el aforo, que es del 25%, se contabilizaron 94 personas, entre ellas turistas de Estados Unidos, Perú y Colombia.
Las autoridades policiales procedieron a realizar el cierre del establecimiento, así como pasar el informe respectivo al Ministerio de Salud, el municipio y la Fiscalía.
Durante el fin de semana la Fuerza Pública recibió gran cantidad de llamadas por fiestas clandestinas e incumplimientos de aforos en todo el país, de las cuales se llegó a todas las que se pudo.
Lo anterior, en momentos en que los centros médicos de todo el país están saturados por personas afectadas por covid-19, e incluso el Gobierno de Panamá prestó un hospital móvil para atender a personas que no encuentran campo.