Una experimento realizado por la compañía Mozilla (responsable del navegador Firefox) en Hamburgo, Alemania, puso al descubierto lo vulnerables que son las personas que se conectan a Internet.
La compañía construyó un apartamento equipado para viajeros que querían disfrutar de un viaje corto al país europeo.
Una vez que los huéspedes se conectaron a las redes inalámbricas, las paredes fueron removidas, dejándolos dentro de una casa de cristal.
Tanto los inquilinos como sus datos fuerton expuestos ante los transeúntes.
Además, se contrató a algunos actores que se colocaron fuera de la casa, para que resultara más evidente lo que sucedía.
La idea era comunicar, tanto a viajeros como presentes, lo que puede sucederles a los datos personales cuando la gente está navegando en línea sin prestar demasiada atención al tema de la privacidad.
Quienes presenciaron el experimento --o quienes fueron parte de él sin quererlo-- reflexionaron sobre cómo los datos en línea pueden contarle más información de la necesaria a las empresas o cómo, a causa de un descuido, su información personal puede ser vendida a terceros.
Estas fueron algunas de las reacciones de los involucrados:
Esta también fue una estrategia de Mozilla para promocionar su más reciente lanzamiento, el sistema de navegación privada con protección de rastreo en Firefox, una característica que permite a los usuarios de Firefox proteger sus datos frente a terceros en la Web, que podrían estar recolectándolos sin conocimiento o control del usuario, explicó la empresa en un comunicado.