Desde 2003, el Teatro Nacional le abrió las puertas al ballet El Cascanueces , el cual fue interpretado en esos primeros años, por el Ballet Juvenil Costarricense, bajo la dirección de Pedro Martin Boza.
Esta iniciativa la retomaron Patricia Carreras, María Amalia Pendones Y Fury Darlintong, en 2008, con el concurso de muchas instituciones que cultivan el arte coreográfico en Costa Rica y evidenciaron que en nuestro país, existe talento suficiente para dicha producción, y el público lo ha reconocido, al llenar año tras año, la sala durante las largas temporadas.
Este año, el Teatro Nacional en su programación no acoge esta producción, y El Cascanueces se traslada al Teatro Melico Salazar, siendo los responsables de la coreografía Wes Chapman, Patricia Carreras y María Monakhova. Para el montaje, siguen estando al lado los bailarines de cuarenta academias y escuelas de casi todas las provincias, así como bailarines invitados de Rusia, Estados Unidos y República Checa.
Lo interesante de esta producción es que ha permitido ver el proceso de evolución muchos jóvenes intérpretes, que a lo largo de estos años han ido asumiendo papeles de mayor complejidad según su crecimiento técnico y la dificultad del personaje. De igual forma, permite que otros bailarines demuestren madurez en las secciones asignadas que ya han bailado.
En la relativo a esta puesta escénica, vi una renovación en el vestuario apoyado por diseños de Milo Junco. De igual manera, Omar Corrales y Fernando Castro retocan la escenografía, y lo mismo hicieron Telémaco Martínez y Chapman con la iluminación. Además, cabe señalar que las dimensiones del escenario del Teatro Melico permite que los ejecutantes realicen sus desplazamientos con mayor solvencia espacial.
Para este clásico, los coreógrafos siguen bajo el guión de Ivan Vsevolozsky y la música de Tchaikovsky. En la función que presencié este año, los bailarines principales fueron María José León, en el papel de Clara quien demuestra crecimiento y solvencia técnica acuerpada por Aslan Karginov como el Príncipe Cascanueces. Otra que demuestra avance es Camila Fernández, al asumir junto a Steven Meléndez el dúo de Hada del Azúcar y Cavallier.
Mariana Lizano enfrenta con fluidez la Reina de las Flores que fue secundada en un bello vals por el grupo de las flores.
El segmento de los chinos lo ejecutó Mariana Palazuelos y Jan Foisek, quien además en el primer acto hizo un brillante Moro. Por su parte Michal Stípa se ganó los aplausos y las risas como Drosselmeier.
Además como solistas destacaron Raquel Muñoz en la Reina de las nieves, en la danza árabe participó Lucía Baltodano y Gustavo Vargas, así como Nicole Jop y Luiciana Koberg en la danza española y las muñecas. Para la parte de Rusos, vi a Carlos Elizondo y Daniel Hernández con buena energía, al igual que a Ronny Ramiréz, Mariana Mora y Daniela Binda en las Flautas. A todos ellos y demás grupales, un teatro lleno les aplaudió con entusiasmo al finalizar su trabajo. Hoy domingo serán sus últimas funciones.
El Cascanueces
Dirección y coreografía: Wes Chapman, Patricia Carreras y María Monakhova
Bailarines principales: María José León, Camila Fernández, Mariana Lizano, Mariana Palazuelos, Aslan Karginov, Steven Meléndez, Michal Stípa, Jan Foisek y Gustavo Vargas
Fecha: miércoles 7 de diciembre de 2016, 8.00 p. m.
Lugar: Teatro Melico Salazar