4/11/12. Teatro la Aduana, San Jose. Obra: Galileo Galilei. foto: eyleen vargas (EYLEEN VARGAS)
El millonario montajeLa vida de Galileo Galilei , que la Compañía Nacional de Teatro (CNT) estrenará mañana viernes, quiere ser una llamada de atención para que al público tenga los ojos muy abiertos y no permita que alguien se oponga al avance del conocimiento.
Esta obra, original del gran dramaturgo Bertolt Brecht, le expone al público parte de los avances astronómicos más importantes de Galilei y cómo la Iglesia católica se opuso a sus investigaciones, al punto de obligarlo a retractarse. El tiempo le dio toda la razón al matemático y científico.
Andrés Montero, director de la obra que cuesta ¢30 millones (¢23 millones se ejecutan este año y ¢7 millones corresponden a la temporada del 2013), aseguró que la relación entre la vigencia temática expuesta en la obra y la actualidad es de lo más atractivo que ofrece.
Montero aseguró que es suficiente ver cómo aún la Iglesia católica se sigue oponiendo a temas como las guías sexuales del Ministerio de Educación Pública , para ver que la historia no ha cambiado tanto en los últimos siglos.
Esta gran producción estatal se estrena este viernes, a las 7:30 p. m., en el Teatro de La Aduana. La obra es la ganadora del concurso de puesta en escena del 2012 y el actor Gerardo Arce se meterá en los zapatos de Galileo Galilei, personaje por el que ha esperado “mucho, mucho tiempo”, según sus palabras.
Además, trabaja un elenco de 19 actores, entre los que destacan Andrés de la Ossa , José Castro, Madeleine Martínez, Alonso Venegas, Rodrigo Durán Bunster, Marilyn Córdoba y Eduardo Carrillo.
Ellos tienen la tarea de dar vida a unos 60 personajes a lo largo de 120 minutos de montaje.
La vida de Galileo Galilei muestra la pasión que este hombre desarrolló ante la posibilidad de nuevos descubrimientos científicos y la oposición que tuvo en su época.
El espectáculo sitúa la acción en la primera década del siglo XV y, de ahí en adelante, transporta al público por diversos momentos de la vida del científico hasta 1642.
Con ingenio y entrega por su trabajo de investigación, Galilei descubre nuevas pruebas que ayudarán a demostrar que la Tierra no es el centro del universo.
Sin embargo, eso va en contra de las enseñanzas de la Iglesia y lo lleva a diversos enfrentamientos. Tendrá que someter sus argumentos ante sabios de la Santa Sede y llegará a ser puesto en manos del Tribunal de la Santa Inquisición.
Al final, tomará un camino que decepcionará a sus más fieles discípulos; no obstante, él tendrá reservada una última gran sorpresa para detractores y amigos.
En primer momento, la obra podría parecer una representación teatral de la vida del científico Galilei. Sin embargo, la biografía le da pie a Brecht para hablar de temas que considera aún más importantes, según el director de la obra.
Montero aclaró que esta producción de la CNT no tiene como objetivo atacar a la Iglesia católica, sino de hablar de esas posiciones que retrasan el avance del hombre y del conocimiento.
Fe en el ser humano. Para el director, Galileo Galilei es una persona que tiene gran fe en la verdad, en el hombre y que cree en la verdad de los hechos tangibles.
Eso lo impulsó a realizar descubrimientos, con el objetivo de que la mayor cantidad de personas se pudieran beneficiar, tanto en la agricultura como en la astronomía y la navegación.
Por lo apasionado que se muestra, la fe casi ciega que tiene en sus investigaciones y lo obstinado que se vuelve ante la duda de sus detractores, es un personaje que el público podría ver como alguien para admirar o un ejemplo por seguir.
No obstante, según el director, Brecht no se concentró en la psicología del personaje. Para el dramaturgo, era más importante retratar la época, el contexto social, histórico, para que el público identifique situaciones que ocurrieron en esos años y vea si están presentes aún en nuestros tiempos.
Por medio de metáforas se habla del uso de la fe para manipular a las personas, para afirmar que ciertas decisiones que afectan a quienes menos tienen son voluntad de Dios.
“Brecht con esta obra le pide al público que tome el telescopio de Galilei y lo apunte contra los poderosos, contra aquellos que nos roban y nos quitan la calidad de vida”, explicó Montero.
También agregó: “Espero que sí (que las metáforas le queden claras al público), porque ese es el motor esencial de la obra, el dejar en evidencia las posiciones obtusas”.
El responsable de La vida de Galileo Galilei confía en que este montaje no genere oposición de autoridades católicas, pese a que se le critica por su papel.
Para él sería absurdo que el clero critique el montaje, porque incluso las máximas autoridades de la Iglesia católica reconocieron que se equivocaron con Galilei.
A las tablas. Llevar este texto de Brecht a escena es un reto para una compañía, tanto por la cantidad de personajes y escenarios que se requieren, la duración del montaje y reflejar el paso del tiempo en los protagonistas.
En cuanto a la duración , Montero reconoció que se sintetizaron algunos diálogos. No obstante, siente que permanece la esencia de la obra y la poesía del autor.
El diseño de la escenografía quedó en manos de Gabrio Zappelli . Su respuesta es un espacio en semicírculo, que se adapta a la acción: en ocasiones, es el cuarto de Galilei y en otras el Vaticano.
El paso de los años por los personajes es otra dificultad a la que Montero tuvo que dar respuesta. En lugar de usar a un niño para el personaje Andrea en las primeras escenas, decidió que el mismo Arturo Campos lo interpretara.
Para el director, la convención teatral permitirá hacer creíble que un mismo actor pueda interpretar primero a un niño y, unas escenas más tarde, a un hombre de 40 años.
La obra está lista, aunque el director habría deseado tener más tiempo para trabajar en ella. Sin embargo, considera que el resultado es una producción que reúne talento fuera de serie.
Los espectadores tendrán muchas posibilidades para ver este montaje. La primera temporada finaliza el 2 de diciembre y habrá una segunda del 1.° de febrero al 24 de febrero, en el mismo teatro. Gladys Alzate , directora de la CNT, dijo que se dividió la temporada porque el Ministerio de Hacienda les confirmó tarde que podrían contar con todo el dinero para la producción.
La hicieron en dos partes para no finalizar la temporada avanzado diciembre, cuando el público va mucho menos al teatro.