Los Ángeles
En un giro histórico para la Academia del cine de Estados Unidos, la junta de directores se reunió este sábado y determinó la expulsión del productor Harvey Weinstein, fundador de la empresa The Weinstein Company y un miembro poderoso y prominente de la industria de Hollywood.
"No solo nos separamos de alguien que no merece el respeto de sus colegas sino que también enviamos un mensaje de que la era de ignorancia deliberada y vergonzosa complicidad en casos de depredación sexual y acoso laboral, en nuestra industria, se ha terminado. El problema de esta situación es un conflicto inquietante que no tiene lugar en nuestra sociedad", dice el comunicado emitido por la Academia y publicado por The New York Times.
La Academia también escribió que "trabajarán para establecer estándares éticos de conducta en todos los miembros para ejemplificar" su nueva posición.
Weinstein, de 65 años, cayó en desgracia el 5 de octubre, cuando ese mismo diario estadounidense publicó un explosivo artículo sobre sus ataques contra jóvenes actrices y asistentes. Desde entonces se han sucedido las acusaciones públicas.
Acto histórico
La junta de directivos de la Academia está conformada por un 40% de mujeres. La expulsión de Weinstein marca un hito en la administración de miembros de la industria, pues con otros casos de crímenes sexuales no ha emitido criterios tan tajantes.
En un repaso de la decisión, el New York Times menciona al director Roman Polanski, quien se declaró culpable en un caso con una víctima de 13 años; al actor Bill Cosby, inmerso aún en una controversia en la que varias mujeres lo acusan de drogarlas y violarlas; y al actor y director Mel Gibson, quien en el 2006 emitió opiniones antisemitas tras ser arrestado por conducir bajo los efectos del alcohol y en el 2011 fue acusado de golpear a una de sus ex novias.
Antes de su reunión, la Academia, institución encargada de entregar los premios Óscar y con más de 8.400 miembros, tachó el contenido de las denuncias de Weinstein como "repugnante, aborrecible y antiético" con sus estándares y "la comunidad de creativos que representa".
El sindicato de productores (PGA) también se reunirá para "considerar procedimientos disciplinarios y el estatus de su membresía", contó a la agencia de noticias AFP una fuente cercana a la asociación.
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El miércoles pasado, la Academia Británica de Artes Cinematográficas y de Televisión (Bafta) suspendió a Weinstein al concluir que su comportamiento es "inaceptable".
Desde que salió a la luz el escándalo, una treintena de actrices como Mira Sorvino, Rosana Arquette, Gwyneth Paltrow, Angelina Jolie y Léa Seydoux dijeron haber sido objeto de insinuaciones sexuales del productor.
Las intérpretes Asia Argento, Lucia Evans, Rose McGowan y otra mujer que permanece bajo el anonimato lo acusan de violación.
Las policías de Nueva York y Reino Unido abrieron una investigación en su contra. "Necesito ayuda, todos cometemos errores, espero tener una segunda oportunidad", dijo Weinstein el miércoles a paparazzis frente a la casa de una de sus hijas.
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El estudio The Weinstein Company (TWC) –que el productor fundó y dirigía junto a su hermano– no ha podido deslindarse del escándalo, a pesar de haberlo despedido. El diario The Wall Street Journal adelantó que terminará siendo vendido o cerrado.
El viernes, Amazon indicó que cancelaba un proyecto con TWC para el director David O'Russell y que lo excluía de otro, una serie sobre los Romanov.
El cineasta Oliver Stone –que en principio lo defendió diciendo que "no debía ser condenado por un sistema de justicieros"– dijo después que no haría una serie prevista sobre la cárcel de Guantánamo si TWC está involucrada.
Harvey llevó a la gran pantalla aclamadas películas como Chicago, La vida es bella, Tiempos violentos, El paciente inglés, El artista, El discurso del rey y La dama de hierro.