En agosto se cumplieron dos años desde la última vez que Niño Koi se presentó en vivo. Un silencio denso, sepulcral, caracterizó a la banda durante ese lapso, en el cual su memoria resistió cálida en el corazón de sus seguidores.
La agrupación costarricense de rock instrumental venía de presentar el video de su canción El último rey de Talamanca, y luego vino el sigilo, el enigma; el “hiato”, como le dicen ellos.
Tácitamente, los músicos separaron caminos. El guitarrista Federico Salas había presentado su carta de renuncia y al rato se le vio unirse a bandas como Ave Negra y Timber of Trees.
El baterista Fabrizio Durán continuó en Los Cuchillos y se unió a Las Robertas. El guitarrista Mauricio Fonseca y el bajista Chris Robinson no mostraron notas. De vez en cuando, alguien en algún lugar se preguntaba: ¿Qué sucedió con Niño Koi?
Considerada por muchos como una de las bandas más cautivadoras y talentosas de su generación, Niño Koi desapareció durante dos años y, cuando llegó la hora de volver, lo hizo envuelta en el aura misterioso que de por vida la caracterizó. ¡Pero resucitó!
De entre los muertos, el grupo resurgirá este viernes 4 de setiembre , con una presentación en el bar Hoxton Pub, en San Pedro, a las 9 p. m. Esa noche estará como invitado el grupo Saturno Devorando, y la entrada costará ¢3.000.
El regreso de Niño Koi no resuena solo en los escenarios, sino que también viene acompañado de un nuevo sencillo titulado Logos, Pathos, Ethos , disponible para descarga gratuita en portales como Bandcamp y Soundcloud.
La canción surgió en los últimos meses, en el marco de los ensayos para poner a la máquina a trabajar de nuevo, contó Robinson. La composición repasa el sonido clásico de la banda y le impregna elementos nuevos a su propuesta, actuando como metáfora de lo que fue y lo que será.
El sencillo acompaña una discografía que se completa con el EP (o disco corto) debut Alegorías (2010) y el disco de larga duración La pequeña muerte (2012). Además, la banda incluyó canciones en el compilado Sí San José (2011) y fue el objeto del documental As Above, So Below, cuya banda sonora consiste de reinterpretaciones de temas de su EP debut.