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Naciones Unidas. EFE. Las organizaciones que combaten el sida mostraron ayer su decepción por la falta de recursos e incapacidad de los países para consensuar en la Organización de las Naciones Unidas (ONU) una declaración valiente en contra de la enfermedad.
Representantes de decenas de gobiernos se reunieron desde el miércoles en la sede de la ONU, en Nueva York, para analizar los logros de los últimos cinco años.
Su meta es también firmar una declaración sobre cómo afrontar la enfermedad en los próximos años.
La negociación de la declaración desató controversia.
Existen discrepancias en temas, como la mención explícita de los colectivos de homosexuales, drogadictos y prostitutas, el fortalecimiento del papel de la mujer y la inclusión de compromisos financieros en la lucha antisida.
Un punto en debate son los fondos para combatir el mal. Se calcula que para el 2008 se necesitarán $22.000 millones, el triple de lo que se aportó el año pasado.
Disconformes. Las negociaciones las siguen de cerca centenares de organizaciones no gubernamentales que luchan contra el sida.
Es la primera vez que estas agrupaciones reciben una invitación a un foro de este nivel.
"Es lamentable que los países no se pongan de acuerdo, justo en este momento que hace falta tanto liderazgo", dijo la fundadora de Ethical Globalization Initiative, Mary Robinson, expresidenta de Irlanda y antigua Alta Comisionada para los Derechos Humanos de las Naciones Unidas.
"No perdonaremos a los gobiernos si no son capaces de alcanzar una declaración que realmente marque una diferencia en la lucha contra el sida", apuntó Peter Piot, director del Programa de las Naciones Unidas contra el Sida.
"Las organizaciones no vamos aceptar una declaración débil", dijo la activista sudafricana Khensani Mavasa, quien se convirtió en la primera persona con sida que tomó la palabra ante el plenario de la Asamblea General de la ONU.
