Buenos Aires. AFP. El Teatro Colón de Buenos Aires, joya arquitectónica de Latinoamérica, cerrará sus puertas en el 2007 para remodelar su sala principal, en el marco de una restauración que procura recuperar el brillo del coliseo argentino de la ópera, el ballet y la música clásica.
El próximo 31 de octubre el bailarín argentino Iñaki Urlezaga, estrella del Royal Ballet de Londres, será el artista principal de la función de despedida, tras lo cual se correrá el telón por 14 meses.
La reapertura oficial está prevista para el 25 de mayo del 2008, cuando se cumpla el centenario del teatro, declarado Monumento Histórico Nacional en 1989.
La restauración completa del teatro, la primera en 100 años, demandará un total de $25 millones, financiados por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Los trabajos se iniciaron en el 2001, pero aún falta lo central: la sala principal.
Las refacciones incluyen el techo, las fachadas, el interior y el entorno del teatro y toman en cuenta medidas preventivas a raíz de la cercanía de la avenida 9 de Julio, que limita con el teatro y es una de las principales arterias del centro de la ciudad por donde circulan millones de vehículos por día.
En cuanto a la sala principal, la reforma incluye la retapización de sus cerca de 2.500 butacas, la recuperación de la araña, las luminarias y las molduras.
Respetuosa de las normas de los teatros de origen italiano y francés, la sala principal del Colón está desarrollada en forma de herradura, bordeada de palcos hasta el tercer piso, lo que favorece la acústica.