San Ramón. Un grupo de excombatientes de la guerra civil de 1948, junto a familiares y amigos de José Figueres Ferrer, conmemoraron ayer –en esta ciudad– los 100 años de su natalicio.
La casa que lo vio crecer, que hoy alberga al Centro Cultural e Histórico José Figueres Ferrer, sirvió de espacio para recordar sus sueños y logros.
En la actividad, Muni y José Martí Figueres, dos de los hijos de don Pepe , develaron una placa y acto seguido se ofició una misa. Además, hubo una serie de intervenciones por parte de representantes municipales y familiares, siempre precedidos por alguna frase del expresidente.
“Estar aquí es sentir una vibración personal de su sentir, una cercanía al hombre y al padre que fue”, expresó Muni Figueres. Mientras, su madre, Karen Olsen, recalcó la importancia de hacer crecer la cultura y educación de los pueblos, iniciando por lo más pequeños.
Como parte de los actos se entregó al Centro una copia ampliada del billete de lotería del domingo 24 de setiembre, alusivo al natalicio de don Pepe .
“Su paso por la vida fue tan importante, dado que transformó los órdenes de la vida de los costarricenses y conmemorarlo en el sitio donde nació, hoy convertido en museo, es complacerlo aunque ya no esté con nosotros”, indicó el diputado José Luis Valenciano, quien relató el enorme valor que le dio don Pepe a la cultura.
“Para qué tractores sin violines” es una de las frases más destacadas del ideario de José Figueres. Esto se destacó con la presentación del Cuarteto de Cuerdas de la Universidad de Costa Rica, que le interpretó a don Pepe melodías en el pueblo donde nació, el 25 de setiembre de 1906.