Las Áreas Marinas de Uso Múltiple (AMUM) impulsan un mecanismo de gobernanza donde diferentes actores participan en la toma de decisiones referente al manejo de los recursos.
"No es una categoría de protección, sino una forma para manejar los recursos en un área geográfica", explicó Erick Ross, biólogo marino de Fundación MarViva.
Actualmente existen dos AMUM: una en el golfo de Nicoya que se extiende desde Cabo Blanco hasta playa Hermosa en Pacífico central y otra en el Pacífico sur que va desde bahía Ballena en Osa hasta Punta Burica en la frontera con Panamá.
Según Ross, el proyecto BID Golfos –cuyos fondos ejecuta MarViva– busca fortalecer a estas AMUM. Ya se hicieron planes de ordenamiento marino que contemplan rutas de navegación y zonificación de pesquerías, esto sin necesidad de crear áreas marinas protegidas.
Incluso, y en el marco de las AMUM, los pescadores de golfo Dulce propusieron una modificación al arte de pesca para que los juveniles de tiburones martillo puedan romperlo y se liberen, así se disminuiría la mortalidad de esta especie por su interacción con pesquerías.