El cambio climático está empujando la flora y fauna del mar y de la tierra a nuevas regiones.
“Le están siguiendo el paso a la velocidad del clima, lo cual quiere decir que están moviéndose a la velocidad y en la dirección en la que los cambios, como la temperatura del océano, lo están haciendo”, afirman investigadores de la Universidad de Princeton en el sitio del centro académico.
Ellos recopilaron 43 años de datos relacionados con el movimiento de 128 millones de animales de 360 especies que viven alrededor de América del Norte, incluyendo especies comerciales, como la langosta, el camarón y el bacalao.
Su análisis determinó que el 70% de los cambios en la profundidad del océano en la que suelen habitar esos animales y el 74% de las modificaciones en la latitud donde se solían ubicar están correlacionados con las fluctuaciones a escala regional en la temperatura del océano.
En promedio, la velocidad a la que las especies estudiadas se están moviendo es de 4,5 millas por década pero esto varía de región en región. Por ejemplo, en algunas partes del norte del continente ese ritmo era de 38 millas al norte por década, mientras que en zonas cercanas al Golfo de México, era de entre 19 kilómetros al sur por década y 11 kilómetros al norte por década.
El aporte del estudio, publicado en la revista Science, es que, según los investigadores, predecir la temperatura y sus cambios no es tan difícil y determinarla proporcionaría un método para predecir a su vez donde estarán determinadas especies.
Esto, dicen, ayudaría a planear mejores políticas de conservación y de pesca comercial, de cara a los posibles conflictos internacionales que podría ocasionar el cambio climático en temas de territorios para pescar.