Ayer, Julio Morales viajó de Amubri de Telire, en Talamanca, a San José para dar su opinión sobre el cambio climático. Morales no es experto en el tema y tampoco pretende serlo; simplemente es un ciudadano preocupado por el ambiente.
“Uno escucha que la contaminación es cada vez mayor, y cualquier persona, en cualquier parte del país, debe sentirse responsable y también creer que puede hacer algo por su país y el mundo”, comentó Morales.
Al igual que él, 100 personas se reunieron ayer en el Gran Hotel Costa Rica para manifestar sus ideas sobre el clima.
La consulta ciudadana fue organizadaaquí por la organización Costa Rica Limpia , pero se trató de una actividad simultánea en 80 naciones promovida por la entidad World Wide Views . El objetivo fue escuchar y reunir las opiniones de 10.000 ciudadanos, cuyo sentir se dará a conocer a los negociadores que participarán en la próxima cumbre del clima (conocida como COP 21). Esta cita se realizará en París (Francia) en diciembre, y se espera llegar al acuerdo de un nuevo tratado para regular las emisiones de gases causantes del calentamiento mundial.
Por esa razón, la consulta cuenta con el apoyo de la Secretaría Ejecutiva de la Convención de Cambio Climático de las Naciones Unidas (CMNUCC).
“Recoger las opiniones y voces de los ciudadanos de todo el mundo solo puede contribuir de manera positiva al nuevo acuerdo universal sobre cambio climático de París en diciembre. Mediante el apoyo a esta singular y novedosa iniciativa, consideramos que estamos haciendo también una importante contribución al Artículo 6 de la Convención referido a la educación y sensibilización del público”, manifestó la tica Cristiana Figueres, Secretaria Ejecutiva de la CMNUCC, en un comunicado oficial.
Como se quiere que los resultados sean comparables entre los países, las consultas emplean el mismo método.
Este fue desarrollado por Danish Board of Technology, tomando en cuenta que se trata de un público no experto en el tema.
En ese sentido, la consulta consistió en cinco sesiones. Cada una trató un tema específico, el cual fue discutido en grupos de seis o siete personas. Al final, cada persona emitió un voto.
Los participantes discutieron sus preocupaciones sobre el cambio climático, cuán ambiciosos deberían ser los acuerdos y si estos deberían ser legalmente vinculantes para todos los países. Los resultados se sistematizarán y se enviarán a World Wide Views. Esta entidad presentará un informe a los negociadores y las autoridades de Gobierno que participen de la cita de París.
Por su parte, Costa Rica Limpia compartirá el material con las autoridades nacionales. Así lo confirmó la directora de la organización, Mónica Araya.
“No es controversial decir que tradicionalmente nuestras posiciones como país no son consultadas y quizá no va a haber tiempo de hacer esta vez una gran consulta ciudadana, la idea es que aprovechen estos insumos. Estos son datos abiertos que se pueden usar”, destacó Araya.
Asimismo, los resultados de la consulta es una forma de retroalimentar a las autoridades sobre la percepción de la ciudadanía.
“Las negociaciones de cambio climático es como estar en una realidad paralela, hasta físicamente hay una división entre los Estados y la gente. Siento que esta consulta cambia el tono y le dice a los Estados que, para que haya un acuerdo fuerte y duradero, la sociedad debe verlo como suyo. Si la gente no entiende el acuerdo, no sabe cómo se negoció, ni conoce la posición de su país, es muy difícil que ese acuerdo sea implementado. La gente no va a querer lo que no entiende”, explicó Araya.