Junto con Ecuador , Costa Rica propondrá la inclusión del tiburón martillo en el Apéndice II de la Convención de Especies Migratorias de Animales Silvestres (CMS), y con ello buscará que los países tomen medidas para su protección.
La propuesta se discutirá en la Conferencia de las Partes de la CMS, que tendrá lugar del 4 al 9 de noviembre en Quito, Ecuador.
Se trata de dos especies de tiburón martillo: Sphyrna lewini y Sphyrna mokarran . Ambas son esenciales para el equilibrio y la salud de los ecosistemas marinos de las islas Galápagos (Ecuador) y la Isla del Coco (Costa Rica).
“El tiburón martillo tiene un gran valor ecológico y además es atractivo para el buceo recreativo. Un tiburón martillo genera hasta $1,6 millones al país a lo largo de su vida gracias al turismo”, comentó Fernando Mora, viceministro de Aguas, Mares, Costas y Humedales del Ministerio de Ambiente y Energía (Minae).
Según Mora, la inclusión en el Apéndice II permitirá trabajar en acuerdos regionales para garantizar su manejo y conservación, ya que sus poblaciones se ven amenazadas por la pesca ilegal y el aleteo.
Ya nuestro país había propuesto la inclusión de estas especies en la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (Cites), lo cual se logró enel 2013.
Tiburón sedoso. Según Mora, el país evalúa apoyar a Egipto en su pretensión de incluir el tiburón sedoso en el Apéndice II de la CMS.
El Minae recibió una petición firmada por 500 personas y una carta respaldada por organizaciones ambientales en que piden al país sumarse a esta iniciativa.
“De aprobarse, eso obligaría a los países a trabajar en planes conjuntos para recuperar las poblaciones de tiburón sedoso y se protegerían los hábitats donde se reproduce esta especie”, explicó Randall Arauz, director de Pretoma.
Según datos de esa entidad, la población de tiburón sedoso en el Pacífico oriental se redujo en un 80%. Esta es una especie que se mueve en aguas superficiales, lo que la hace vulnerable a la pesca dirigida e incidental (accidental).
“El 90% de las descargas de tiburón en puerto son sedosos y lo que nos preocupa es que tanto las descargas como las tallas han disminuido; esto refleja una reducción de la población. Más del 90% de los sedosos descargados en el 2011 ni siquiera habían alcanzado la talla de madurez”, dijo Arauz.
Para el director de Pretoma, la inclusión en el Apéndice II de la CMS serviría de “sombrilla” a las medidas legales que pudieran tomarse en Costa Rica, dado que esta es una especie migratoria.
“El tiburón sedoso ya está protegido en el océano Atlántico, así como en el Pacífico Occidental y Central, pero en el Pacífico Oriental, donde está Costa Rica, la captura y el comercio del tiburón sedoso continúan sin cesar”, lamentó Arauz.