Un total de 276.813 hectáreas de bosque se salvaron de la motosierra y se mantuvieron en pie durante el 2014, gracias al Programa de Pago por Servicios Ambientales (PSA).
Así lo dio a conocer ayer el Fondo Nacional de Financiamiento Forestal (Fonafifo) en su informe de labores correspondiente al año anterior.
El PSA fue creado por la Ley Forestal en 1994 y entró en vigencia en 1997, con el objetivo de frenar la deforestación y promover la conservación de los bosques en fincas privadas.
La iniciativa se financia a partir del impuesto de 3,5% a los combustibles y el canon de agua.
La idea es que el finquero reciba un pago por mantener la cobertura boscosa en su propiedad. Solo en el 2014, Fonafifo mantuvo contratos de PSA con 1.055 dueños de tierras de este tipo.
Por regiones, la Brunca y Huetar Norte concentraron la mayoría de convenios, con un 22% cada una, seguidas por Huetar Caribe (20%), Chorotega (16%), Central (14%) y Pacífico Central (6%).
Los acuerdos se firmaron para garantizar la protección del bosque, lo que incluye temas como reforestación, regeneración natural, manejo boscoso y sistemas agroforestales, los cuales combinan actividades agropecuarias con la siembra de árboles.
Potencial. Según Jorge Mario Rodríguez, director de Fonafifo, los contratos por sistemas agroforestales muestran una tendencia a crecer, principalmente entre pequeños propietarios.
Incluso, el país tendría un potencial de recuperación forestal de 620.000 hectáreas si solo se combinara árboles y ganadería.
“Los sistemas agroforestales tienen un potencial de 1,5 millones de árboles”, dijo Rodríguez.
Para Gina Paniagua, viceministra de Agricultura y Ganadería (MAG), la apuesta a estos esquemas permitirá incrementar la cobertura forestal del país y sumar al sector en la lucha contra el cambio climático, además de que puede convertirse en un motor de desarrollo para cantones pobres.
Costa Rica cuenta con una cobertura forestal de 52,38% del territorio nacional; esto, gracias al sistema de áreas de conservación y a lo conseguido por el PSA.
Rodríguez resaltó que esta cobertura boscosa aún podría incrementarse entre 58 y 60%.
En este sentido, los sistemas agroforestales también permitirán conexiones en favor de la conservación de la biodiversidad, ya que las especies pueden utilizar las fincas como zonas de paso hacia los parques nacionales.