El ejercicio es de las recomendaciones más acertadas para tener un estilo de vida más saludable. Sin embargo, esto, en muchas ocasiones, viene acompañado de cansancio y de dolor.
Un nuevo reporte médico muestra con pruebas que no en todos los casos es así.
Según la pesquisa, dos personas con el mismo peso, el mismo nivel de condición física y el mismo programa de ejercicios podrían reaccionar de modo totalmente diferente: una de ellas con mucho dolor y cansancio, y la otra con un poco de cansancio, pero sin dolor y con más energía.
Aunque son varios los factores que pueden estar en juego para que eso ocurra, un estudio hecho por la Universidad de Lund –ubicada en Suecia– y publicado en la revista Journal of Applied Physiology , señaló que las personas con diabetes tipo 2 sufren no solo de más dolor y cansancio a la hora de ejercitarse, por ejemplo. Además, ellas deben hacer un esfuerzo mayor para obtener los mismos resultados.
El estudio. Para llegar a estas conclusiones, los investigadores reunieron a cien personas en su cuarta década de vida, todas ellas sedentarias.
La mitad de los pacientes padecían diabetes o tenían síntomas diagnosticados de prediabetes (como sed y orina frecuente, hambre excesiva, visión borrosa o fatiga). La otra mitad no presentaba signos de la enfermedad.
A todos los voluntarios se los puso en el mismo programa de actividad física durante siete meses.
Al cabo de este tiempo, las personas con diabetes o riesgo de desarrollarla tenían su cuerpo menos en forma y sus mediciones de grasa, y azúcares estaban en peores condiciones.
Ese grupo de personas continuó con las sesiones de ejercicios hasta completar resultados similares a los de las personas sanas. En promedio, demoraron más de un mes en lograrlo.
“Aún tenemos que hacer más estudios para ver si la intensidad del ejercicio varió entre un grupo y otro, pero estos resultados por sí mismos ya son útiles”, manifestó, en un comunicado de prensa, Ola Hansson, autora de la consabida investigación .