París
Más de uno de cada diez adultos en el mundo es obeso, es decir el doble que hace 40 años, y la proporción volverá a duplicarse de aquí a 2025, reveló este viernes un informe.
La investigación publicada en la revista The Lancet advierte sobre el riesgo de una crisis de "obesidad severa" y enfermedades provocadas por exceso de grasa y azúcar en países ricos o de medianos ingresos, aunque los kilos demás siguen afectando principalmente a las naciones más pobres.
"Habrá consecuencias para la salud de magnitudes que desconocemos", dijo el coautor del análisis Majid Ezzati, del Imperial College de Londres.
De 5.000 millones de humanos adultos vivos en 2014, 641 millones eran obesos y en nueve años los gordos serán 1.100 millones, según el informe.
La gente se divide entre aquellos que tienen peso saludable y no saludable en función de una escala relativa a la altura denominada Indice de Masa Corporal (IMC).
Un IMC saludable va de 18,5 a 24,9. Un IMC por debajo de 18,5 es considerado como anormalmente bajo (desnutrición), mientras que de 25 para arriba implica exceso de peso. Hay obesidad a partir de 30 y de 35 en adelante obesidad severa, considerándose más allá de 40 obesidad extrema con riesgo de vida.
A escala mundial, entre los hombres la proporción de obesos se triplicó, pasando de 3,2% en 1975 a 10,8% actualmente (unos 266 millones). Entre las mujeres aumentó de 6,4% a 14,9% (375 millones), indica el estudio.
Ello equivale a que la persona promedio ha venido aumentando 1,5 kilos por década.
"Si la obesidad sigue aumentando a este ritmo, para 2015 aproximadamente un quinto de los hombres (18%) y de las mujeres (21%) serán obesos", indica en un comunicado The Lancet.
Más del 6% de los hombres y 9% de las mujeres padecerán obesidad severa.
La proporción de gente excesivamente delgada en el mundo disminuyó menos de lo que creció la población de obesos, advierten los autores, pasando de un 13,8% en 1974 a 8,8% entre los hombres y de 14,6% a un 9,7% entre las mujeres.
"En los últimos 40 años, pasamos de un mundo en el que el peso por debajo de lo normal era el doble de frecuente que la obesidad a otro en el que hay más gente obesa que demasiado delgada", indicó Ezzati.
Al ritmo actual, habrá más mujeres severamente obesas (IMC de 35 o más) que con delgadez anormal, y el mundo no podrá alcanzar la meta de frenar la obesidad a niveles de 2010 para 2025.
La gente más obesa del mundo vive en las islas de la Polinesia y Micronesia, donde un 38% de los hombres y más de la mitad de las mujeres son obesos.
Cerca de la quinta parte de los adultos obesos (118 millones) viven en seis países de altos ingresos: Estados Unidos, Gran Bretaña, Irlanda, Australia, Canadá y Nueva Zelanda.
En Estados Unidos vive uno de cada cuatro hombres severamente obesos y casi una de cada cinco mujeres pertenece a esa categoría.
De aquí a 2025, el estudio prevé que un 43% de las mujeres y 45% de los hombres de Estados Unidos serán obesos.
En Europa, Gran Bretaña tendrá la proporción de mujeres obesas más elevada de Europa (38%) dentro de nueve años, seguida por Irlanda (37%) y Malta (34%). En el otro extremo, Timor, Etiopía y Eritrea tienen el BMI promedio más bajo del mundo.
"Para atender este problema será necesario adoptar políticas sociales y de alimentación que mejoren la calidad alimentaria entre los más pobres, pero también evitar el consumo excesivo de carbohidratos procesados y otros alimentos no saludables". Para los casos más extremos de obesidad, la cirugía puede ser el recurso más eficaz.
América Latina se encuentra en valores más cercanos a la normalidad pero por lo general con exceso de peso, con un BMI promedio ligeramente superior o superior al tope de 25.
Más de una quinta parte de los hombres en India, Bangladesh, Timor, Afganistán, Eritrea y Etiopía, y la cuarta parte de las mujeres de Bangladesh e India tienen peso insuficiente, según la investigación, que recabó datos de 1.698 estudios realizados en un total de 19,2 millones de adultos de 186 países, que representan un 99% de la población mundial.