En algún momento de la prehistoria el hombre de Neandertal y el ser humano moderno se mezclaron y los resultados de esa unión dejaron rastro en nuestros genes.
Dos investigaciones publicadas en las revistas Science y Nature revelan que los humanos de hoy llevan en su ADN un porcentaje de genes de los neandertales.
Ese legado genético del Homo neanderthalensis se traduce en características físicas, enfermedades y hasta en hábitos nocivos.
Algunas de esas características representaron ventajas adaptativas para el Homo sapiens . Por ejemplo, genetistas de la Facultad de Medicina, de la Universidad de Harvard, concluyeron que los trazos del ADN neandertal afectan la producción de la queratina, proteína que es el principal constituyente de la piel, el cabello y las uñas.
La queratina contribuye a la resistencia dérmica de modo que los neandertales nos heredaron una piel más resistente y “equipada” con un aislante térmico para sobrevir a climas fríos.También se hallaron huellas neandertales en zonas del genoma relacionadas con la pigmentación de la piel.
Sin embargo, nuestros parientes prehistóricos también nos heredaron una nada halagadora colección de males como diabetes tipo 2, lupus, cirrosis biliar, enfermedad de Chrohn e incluso el nocivo hábito de fumar.
Atracción fatal. Los neardentales vivieron en Europa y Asia y se extinguieron hace 30.000 años.
Los investigadores estimaron que ese cruce entre el Homo neanderthalensis y el Homo sapiens ocurrió en algún momento en el periodo de entre hace 40.000 y 80.000 años. Sin embargo, esta no era la pareja perfecta, genéticamente hablando. “Según nuestros hallazgos, cuando los humanos antiguos se mezclaron con los neardentales las dos especies estaban al borde de una incompatibilidad biológica”, explicó el genetista David Reich, uno de los autores del estudio publicado en Nature .
De acuerdo con las investigaciones, los humanos actuales no africanos (es decir, europeos y asiáticos heredaron entre un 1% y un 3% de sus genes de los neardentales. Reich y sus colegas analizaron las variantes genéticas de 846 personas de herencia no africana, 176 individuos de África subsahariana, así como la secuencia del genoma de un hombre neardental de hace 50.000 años.
Los científicos hallaron que la presencia de los genes neardentales en los humanos de hoy no es uniforme de modo que en ciertas partes del genoma hay altas concentraciones, mientras que en otras son prácticamente ausentes.