La sonda Cassini detectó indicios leves pero claros de la presencia en Saturno de polvo procedente del exterior de nuestro sistema solar, según reveló una investigación publicada esta semana en la revista Science.
Con un instrumento denominado analizador de polvo cósmico, Cassini ha tomado muestras de millones de granos de polvo helado procedentes, en mayor parte, de una de las lunas de Saturno: Encelado, que es geológicamente muy activa.
De ese gran número de granos microscópicos, los científicos centraron su atención en 36, pues concluyeron que proceden del espacio interestelar, es decir, la zona entre estrellas.
Pero, ¿qué hace en Saturno material procedente de fuera del sistema solar? En la década de los noventa, la misión Ulysses de la Agencia Espacial Europea (ESA) y de la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio (NASA), realizó el primer hallazgo in situ de polvo interestelar.
Esas observaciones fueron confirmadas luego por la sonda Galileo, de la NASA.
Ahora, con ayuda de Cassini, los expertos rastrearon el origen de ese material y hallaron que provenía de una nube interestelar local. Se trata de una burbuja de gas y polvo prácticamente vacía que el sistema solar atraviesa a una velocidad considerable.
“Siempre habíamos deseado poder de detectar a estos intrusos interestelares en Saturno con Cassini; sabíamos que si dirigíamos la vista hacia la dirección correcta, los encontraríamos”, declaró el científico Nicolas Altobelli, autor principal del estudio.
Los diminutos granos de polvo se desplazan en la cercanías de Saturno a una velocidad de 72.000 kilómetros por hora.
Datos. Cassini es un proyecto conjunto entre la NASA y la Agencia Espacial Italiana (ASI). Fue lanzada en 1997 y entró a la órbita de Saturno en julio 2004.
A diferencia de Ulysses y Galileo, Cassini analizó la composición del polvo interestelar por primera vez y reveló que estaba conformado por una mezcla específica de minerales, no de hielo. Los granos tenían una composición química similar, con presencia de elementos principales de la formación de rocas, como magnesio, silicio, hierro y calcio.
Además, se encontró que algunos elementos más reactivos, como el sulfuro y el carbono, eran menos abundantes.
Los científicos creen que estos granos se han formado de manera bastante uniforme.
“El polvo cósmico se produce cuando muere una estrella, pero, dada la gran diversidad de tipos de estrellas en el Universo, esperamos encontrar una variedad muy amplia de tipos de polvo durante el largo periodo que comprende nuestro estudio”, dijo el investigador Frank Postberg.