Los sextillizos Emma, Tomás, Valentina, Diego, Andrés y Gabriel González Villegas libran una lucha para sobrevivir con calidad de vida.
Para ellos, las próximas 48 horas son decisivas.
Según explicó Patricia Fallas, jefa de Neonatología del Hospital México , entre los peligros que enfrentan está la posibilidad de una hemorragia cerebral, problemas respiratorios, obstáculos en su desarrollo o muerte por su bajo peso y prematuridad.
“La mayor mortalidad en el primer año de vida se da en menores de 28 días y la primera causa es el extremo bajo peso (menos de un kilo).
”Es muy normal que los bebés pierdan peso durante los primeros días. Un niño que completa su gestación y tiene un peso normal (entre 2.500 y 4.000 gramos) pierde entre 5% y 10% de su peso, pero un bebé prematuro puede perder hasta un 15% y, eso, es mucho en bebés tan pequeños”, añadió.
Su madre, Silvia Villegas, de 34 años y vecina de Belén, avanza en su recuperación en el México y posiblemente solo requiera dos días más de observación médica.
Su vientre llegó a pesar entre siete y ocho kilos. Estaba en reposo absoluto y bajo vigilancia médica desde el 30 de abril.
Juan Francisco González, padre de los niños, admitió ayer, por primera vez, que la pareja recurrió a la inseminación artificial.
¿Cómo están ellos? Tres de los hermanos González Villegas (Emma, Andrés y Gabriel) están en el Hospital México; uno en el Hospital de la Mujer (Valentina); uno en el Hospital Nacional de Niños (Tomás), y el otro, en el San Juan de Dios (Diego). Es posible que permanezcan internados durante dos o tres meses, mientras suben de peso y mejora su estado de salud.
Cada pequeño está al cuidado de al menos un equipo formado por neonatólogo, enfermero y terapeuta respiratorio. Los que están más delicados tienen dos neonatólogos a su disposición.
Dentro de los menores, hay dos que llaman la atención por razones opuestas: Emma, por su buen estado, y Gabriel, quien fue el que nació más delicado.
“Emma es una campeona. Ella fue la primera en nacer y tiene una ventilación no invasiva, es decir, no tiene su traquea intubada, sino un tubo en la nariz, como ayuda, ella hace el proceso por sí misma”, explicó Sandra Vargas, jefa de Gineco-Obstetricia del Hospital México.
Gabriel es el de menor peso y fue el último en nacer y, aunque se encuentra estable, dio batalla a los especialistas, pues fue quien más tiempo permaneció en el vientre y más minutos soportó la anestesia aplicada a la madre.
“Solo tenía el latido cardíaco en frecuencia baja. No lloró, no se movió, no respiró, no tenía reflejos. Tuvimos que ponerle adrenalina para reanimarlo, eso es algo que yo tenía muchísimos años de no hacer”, aseguró Fallas, quien reconoció que no esperaban este nacimiento séxtuple para el domingo. Más bien, hoy martes estaba programada una reunión para fijar día y hora de la cesárea.
“Sin embargo, esto no quiere decir que sea quien más luchas va a tener que dar. En este momento, riesgos tienen todos, pero todos están dando su lucha”, agregó Patricia Fallas.
Evolución. ¿Cuándo estarán fuera de peligro los seis hermanos heredianos? Para Fallas, no hay una fecha definida.
“Deben respirar por sí solos, comer por sí solos y tener mayor respuesta a estímulos, pero eso no tiene un tiempo determinado”, comentó la neonatóloga.
La alimentación es un punto crucial en esta etapa. Por sus condiciones, los pequeños no pueden consumir leche aún y se les da una alimentación llamada parenteral, que consiste en suministrarles, mediante un catéter, una solución de carbohidratos y proteínas las primeras 24 horas, y a partir de ese momento, incluir los lípidos.
“Conforme vayan ganando peso y mejorando su estado deglutorio, se les podrá dar leche materna. Se les empieza a dar pequeñas cantidades, si es posible de la mamá, si no, para eso hay un banco de leche materna. También existen fórmulas especiales para niños en crecimiento”, explicó Danilo Medina, jefe de Ginecología, Obstetricia y Neonatología del Hospital Calderón Guardia, quien no participó de este parto, pero sí del reciente nacimiento de cuatrillizos en ese centro.
Transcurridos los días más críticos, la observación se mantiene, pues se debe analizar su desarrollo, su capacidad motora, su capacidad sensorial y su vista.
Pese a todas las complicaciones que enfrentan los primeros sextillizos ticos, las autoridades del Hospital México sostienen que los bebés están en las manos de los mejores en su campo en el país. Colaboró Monserrath Vargas