Tener un propósito en la vida promueve la longevidad, asegura un estudio publicado en Psychological Science, una revista de la Association for Psychological Science (APS).
Luego de analizar los datos de más de 6.000 participantes, los investigadores vieron que los que tenían un propósito vital vivieron más que los que no.
El estudio se realizó durante 14 años, durante los cuales se monitorearon a los participantes después de la evaluación inicial.
En ese lapso de tiempo, 569 de los participantes murieron. Estos habían reportado menor cantidad de propósitos en la vida y de relaciones positivas respecto de los que seguían vivos.
Aún controlando otros marcadores psicológicos y de bienestar afectivo, esta es la variable que parece haber logrado amortiguar ampliamente el riesgo de mortalidad en la adultez, afirman los investigadores.
“Tener una dirección para la vida y establecer objetivos generales de lo que se quiere lograr en ella puede ayudarle a vivir más tiempo, independientemente del momento en que encuentre su propósito", dice Patrick Hill, en el sitio de la APS.
Los investigadores vieron que estos resultados se vieron en diferentes edades, no solo en adultos mayores.