Se les quiere o se les odia; Los Ajenos no buscan esa reacción, pero les pasa a diario. Sin embargo, poco les preocupa el qué dirán de su trabajo; para la banda costarricense lo esencial es que tienen un proyecto que les permite vivir de la música y los hace felices.
¿Son irreverentes? ¡En abundancia! y les encanta, pero no lo usan como una fórmula para atraer las miradas a su trabajo. Sencillamente, hacen la música que a sus fans y a ellos les gusta.
Dos de sus canciones más sonadas hablan de esa irreverente filosofía: Me vale un cu y Pamela Chu . Ellos aseguran que hay un sector de sus colegas que los “detestan”, otros les hacen bromas por esa forma de ser y por ocurrencias musicales y en video.
Sin embargo, la mejor muestra de que están en un camino con más seguidores que detractores, es que sus conciertos están siempre llenos. Mientras que sus videoclips gozan de gran popularidad en YouTube: Me vale un cu suma 226.000 reproducciones; Pamela Chu tiene 166.000 vistas y Mireya alcanzó las 120.000.
“Si nos hace gracia a nosotros, ¡es válido! Nos dimos la licencia de hacer lo que nos da la gana. Creo que más que irreverentes, lo que hacemos es reírnos de las cosas de la vida y de los problemas”, aseguró Andrés Fofo Madrigal, saxofonista del grupo.
Éxito. Entre casados y hamburguesas de la soda Chelles, en el corazón de San José, los integrantes del grupo pusieron cara de asombro cuando se les preguntó por qué le va bien al grupo.
“¿Éxito? Lo que tenemos es mucho trabajo; si se quiere, eso es el éxito. Tenemos trabajo y estamos muy felices. En diciembre, hicimos 36 conciertos y en febrero tuvimos 28 presentaciones”, explicaron Fofo y Luis Gabriel Loría, mejor conocido como Luisga (voz y guitarra).
Llegar hasta este punto en su carrera llevó tiempo. El proyecto comenzó como Luisga y Los Ajenos , grupo nicoyano que se hacía camino entre los intérpretes de canción de autor.
Los primeros pasos, en el 2006, los llevó a presentar temas como Mírame y Recuerdo en 6 .
En sus inicios, la sonoridad del ensamble mostraba mucho las raíces guanacastecas de su cantante Luisga.
Fueron años en los que la música era un complemento de otros trabajos, hasta que les propusieron tocar en un club. Eso requería que flexibilizaran su oferta y que no temieran a tocar algunos covers de música comercial.
“Fue prueba y error, cometimos errores (...) Fue una evolución; tuvimos unos segundos Ajenos que se presentaban en el Jazz Café y, ahora, estamos en esta nueva etapa donde nos dimos cuenta de lo que le gusta al público”, amplió Luisga.
Quieren ver hasta donde los lleva la música, sencillamente no están dispuestos a ponerle freno a lo que les gusta. Por eso, tienen entre manos muchos proyectos.
El próximo es la publicación de su disco Pena ajena , que saldrá al mercado en junio. Será un larga duración con esos irreverentes temas con sabor a cumbia, merengue, murga y ska , pero también incluirá baladas y temas pop originales, compuestos por Loría.
El material se grabó con invitados como Luis Alonso Naranjo (Escats), Shel Dixon , Sonia Bruno (chelista), Ricardo Ramírez ( Éditus ) y el Club Atlético Carnaval de Argentina .
La grabación se realizó de la mano del ingeniero Paul Rubinstein, de Real Music Productions (Orquesta Filarmónica, El Consorcio, José Cañas , Patiño Quintana, AB Tauro). Gracias al resultado, Los Ajenos sienten que el CD les abrirá nuevas puertas.
En el futuro cercano, el grupo tiene planeada una gira de promoción y presentaciones a Guatemala. Viajarán durante dos semanas en julio, y, luego, realizarán una gran actividad en Costa Rica para presentar en vivo Pena ajena .
“En unos años, queremos ser el grupo con más discos. Nosotros seguiremos haciendo nuestro trabajo, queremos que la gente se divierta y estén contentos con nosotros, que nos apoyen, que nos contraten y demostrar que se puede vivir de la música, sin vicios, ordenados y siendo buenos administradores”, finalizó Madrigal.
Son jóvenes, profesionales y con su música charanga pegada en radios y en sus conciertos, solo se vislumbra más trabajo y nuevos éxitos para Los Ajenos.