Poco se ha escuchado sobre los anticonceptivos postcoitales, pero sí existen. Son un recurso de emergencia para evitar que la mujer quede embarazada. Es la pastilla del día después, un anticonceptivo que no es abortivo.
La mejor manera de evitar un embarazo no deseado es a través de una planificación responsable. Pero hay situaciones en que por una razón u otra el método elegido falla. Un olvido en la toma de las pastillas anticonceptivas, la ruptura del preservativo o un peligroso descuido pueden derivar en un embarzo no deseado.
Este "plan de emergencia" ha sido probado por la Organización Mundial de la Salud en 3.000 mujeres de 15 países.
El día después
El inicio de un embarazo se puede impedir hasta 72 horas después de consumada la relación sexual.
A grandes rasgos, lo que se hace es que se le suministra al organismo una alta dosis de hormonas (contenidas en las pastillas anticonceptivas habituales).
El compuesto activo levonorgestrel es el que recomienda la FDA (Administración de fármacos y alimentos de Estados Unidos) para ello. Dicho compuesto está autorizado por la oficina de registro y control de medicamentos del Ministerio de Salud. "Al estar registrado el medicamento, los médicos la pueden recetar bajo su propia responsabilidad", dice la viceministra de Salud, Xinia Carvajal.
Danilo Medina, especialista en ginecología, dice que la aplicación de este medicamento en esa forma es conocido por la comunidad médica, pero su uso no se ha popularizado.
Agrega que es bastante efectivo. Lo que se logra con las dosis del levonorgestrel (que deben ser indicadas por un especialista) es que se produce una hemorragia por supresión a las 24 ó 72 horas de ingeridas.
Con ello, se descontrola el ciclo menstrual al inducir un desprendimiento anticipado del endometrio (necesario para que se implante el óvulo). Sin endometrio, el óvulo no tiene dónde anidar e iniciar el embarazo.
Solo en emergencias
Este método anticonceptivo ha demostrado ser sumamente efectivo, pero solo debe utilizarse en casos de emergencia.
En primer lugar porque la cantidad de hormonas a las que se ve sometido el cuerpo de la mujer no es saludable.
Además, trae efectos secundarios. En el 23 por ciento de las mujeres produce mareos, alrededor del 15 por ciento presentan dolores abdominales, de cabeza o fatiga; entre otros.
Además, aunque sea capaz de evitar el embarazo, no hace la función de protección contra enfermedades de transmisión sexual (esto solo se logra con el preservativo).
Por último es importante anotar que este método no es efectivo en mujeres que ya están embarazadas, no es una píldora abortiva.
Diferencias con la RU-486
Los anticonceptivos de emergencia, también conocidos como los "del día después", actúan totalmente diferente a la RU-486: la polémica píldora abortiva.
wLa RU-486 autorizada en pocos países (Francia, Gran Bretaña, Suecia, China y Estados Unidos) provoca un aborto, es decir, interrumpe un embarazo ya existente. Este medicamento no está autorizado en nuestro país.
wEl tratamiento anticonceptivo postcoital actúa modificando el endometrio (la capa mucosa que recubre el útero) para evitar la implantación del embrión. Además puede inhibir o retrasar la ovulación y alterar el movimiento de esperma en las trompas de falopio.