Un majestuoso cenízaro, de unos 400 años de antiguedad, fue declarado Árbol Excepcional 2011 por el Instituto Nacional de Biodiversidad (INBio) .
El espécimen se encuentra en Abangares y mide unos 30 metros de altura y más de 10 metros de diámetro, indicó el INBio.
Este cenízaro ganó entre seis candidatos presentados no solo por su tamaño, sino también por su importancia para la conservación. Hace varios años, se propuso talarlo para hacer los pupitres de una escuela de la zona, pero el propietario del árbol, Wálter Niehaus Siebe, decidió comprar los pupitres con tal de que no talaran el gran cenízaro.
Esta especie puede encontrarse desde el norte de México hasta Perú y Brasil. En nuestro país está en las dos vertientes, pero es más común encontrarlo en el Pacífico.
“Da albergue a muchas otras especies de plantas, como epifitas, orquídeas y cactus”, dijo Zamora.
“Por el tamaño de este ejemplar, estimo que podría tener cerca de 400 años”, añadió.
Por la sombra que da y sus hermosa floración, también se ha utilizado tradicionalmente como un árbol ornamental en plazoletas.
De acuerdo con el INBio, las vainas son un importante suplemento como forraje para el ganado durante la estación seca.
Según comentó Zamora, el cenízaro es conocido como “árbol de lluvia” en inglés (rain tree) debido a una asociación que tiene con las chicharras.
“Las chicharras, en verano, se instalan en sus ramas y se alimentan de su savia. Extraen los nutrientes y luego liberan el resto del líquido, que cae al suelo y hace parecer que cae un poco de lluvia”, comentó el experto.
La entrega oficial del premio como Árbol Excepcional 2011 se realizará mañana, a las 10 a. m., en una ceremonia que se efectuará en San Cristóbal de Las Juntas de Abangares. Esta actividad es parte de las celebraciones por el Día del Árbol, que se celebra mañana.