Madrid. Reuters. Clemente Domínguez, a quienes sus seguidores apodaban el "Papa Clemente", ya que se consideraba el auténtico Papa y aseguraba que el Vaticano estaba tomado por el demonio, murió a los 58 años, informaron las autoridades españolas.
Clemente, quien después de la muerte de Pablo VI se autoproclamó su sucesor con el nombre de Gregorio XVII, era el líder de la llamada Iglesia Palmeriana que él mismo había creado y cuyos seguidores pensaban que sería crucificado antes de que tuviera lugar una especie de Apocalipsis.
Clemente creía que Dios lo coronaría después de la muerte del papa Pablo VI en 1978 y rechazó los cambios realizados en los años 60, tales como decir misa en lenguas locales en lugar de latín y dialogar con otras ramas del cristianismo.
Conocido sobre todo después que juró haber visto a la Virgen en 1969, cerca de Palmar de Troya, este excontable muy influenciado por el obispo integrista francés Marcel Lefebvre, se ordenó sacerdote y en 1976 fue ordenado obispo por el obispo vietnamita Pedro Martin Ngo-Din Thuc.
La historia de la iglesia Palmariana comenzó el 30 de marzo de 1968, cuando cuatro niñas de la localidad dijeron haber visto a la Virgen en una zona conocida como El Lentisco, mientras otros entraban en éxtasis y aseguraban recibir sus mensajes rodeados de una masa deseosa de presenciar milagros.
Desde entonces, Clemente participó en todo lo referido a las apariciones y sus fieles están convencidos de que posee estigmas por los que llegó a sangrar.
Tras erigir una basílica en Palmar de Troya, rodeada de altas murallas, para su orden, gracias a una gran donación, Domínguez inscribió su orden en un registro de asociaciones religiosas.
La información entregada en el complejo catedralicio de la población sevillana de Utrera muestra fotografías de Gregorio, quien perdió los ojos en un accidente en la década de 1970, con manos ensangrentadas, frente y torso similar a las heridas de Cristo en la cruz.
La Iglesia Cristiana Palmeriana cuenta con miembros de EE. UU. y beatificó al exdictador español Francisco Franco, entre otros.
Un portavoz del Ayuntamiento confirmó la muerte, ocurrida el lunes. Las campanas de la basílica doblaron durante una hora.