Colorado. El actor y cineasta Mel Gibson dijo que asistió a misa cada mañana durante el rodaje de su nueva cinta, La Pasión , porque quería mantenerse purificado para trabajar en el proyecto.
La película, dirigida por Gibson, es protagonizada por James Caviezel como Jesucristo en las últimas 12 horas de su vida. Monica Bellucci hace el papel de la prostituta María Magdalena.
El filme, con un costo de $25 millones, es hablado en arameo.
Gibson dijo que su fe cristiana inspiró la película, para la que busca un distribuidor.
Inspirado
"No soy un predicador ni un pastor", fue lo que dijo Gibson, de 47 años de edad.
"Sin embargo, realmente siento que mi carrera me ha llevado a hacer esto. El Espíritu Santo actuó en mí en este filme... Espero que la película tenga el poder de evangelizar".
Gibson añadió que el largometraje es una extraña mezcla entre lo más difícil que ha hecho y una increíble facilidad. "Todos los que trabajaron en esta película cambiaron. Hubo agnósticos y musulmanes, que en el estudio se convirtieron al cristianismo", manifestó.
La cinta ha levantado una gran polémica, antes incluso de que su rodaje haya concluido.
Asimismo ha desatado dudas y oposiciones, tanto de los católicos como de los judios, estos últimos temen por la visión que ofrecerá este reconocido católico tradicionalista sobre la pasión de Jesús.
"Lo que me preocupa es leer que la finalidad del filme es deshacer los cambios hechos por el Vaticano II", según indicó el rabino Marvin Hier.
Sus palabras hacen referencia a un artículo aún no publicado en el diario The New York Times donde al parecer un amigo de Gibson, Gary Giuffre, asegura que el actor y realizador culpa a quien se debe, por la muerte de Jesús. El filme será estrenado en el 2005, no tendrá subtítulos.
Su fuerte será solo las imágenes.