¿? - 1493. En el Perú precolombino, Inca era el nombre del soberano reinante, de su clan o familia y, por extensión, de su imperio y cultura. El imperio de los incas, una asombrosa organización político-social, floreció en un clima culturalmente hostil e inhóspito, en las casi inaccesibles e inhabitables cumbres de la cordillera de los Andes. En su período de máximo esplendor este imperio comprendía territorios pertenecientes hoy a cinco países suramericanos: Perú, Ecuador, Bolivia, el norte de Chile y el noreste de Argentina, con una superficie aproximada de un millón setecientos mil kilómetros cuadrados, extendida desde la costa pacífica hasta la selva amazónica. Aunque algunos autores le atribuyen remotísima antigüedad, la crítica moderna fija en el siglo X de nuestra era el nacimiento de este imperio, y sitúa su máximo esplendor en el siglo XV.
Tres pueblos constituyeron la base del imperio incaico: los aimaraes del sur de Cuzco, llamados también coyas; los yungas y los quechuas, presuntos fundadores del imperio; el núcleo central era el Cuzco "ombligo del universo". Según Clement R. Markham, su cultura es autóctona, nacida en el mismo corazón de los Andes. Por el contrario, Max Uhle la considera de procedencia marítima y alega la evidente analogía de elementos sociales y religiosos con grupos étnicos de México, de las islas del Pacífico y de Asia. Con Atahualpa, rey de Quito, que dio muerte a su hermano Huáscar y fue prisionero de Pizarro, se extinguió la dinastía. El imperio inca desapareció a manos de los españoles cerca de 1532.
Aunque es muy difícil establecer certera cronología porque los incas carecían de escritura, se ha establecido que Tupac Inca Yupanqui fue soberano de 1471 a 1493. Hijo de un prestigioso rey de nombre Pachacuti, a los 15 años fue nombrado heredero del trono. Ya en tiempos de su padre sobresalió como uno de los más grandes generales, y realizó una serie de conquistas que llevaron el imperio a su punto culminante: se apoderó de Chochapoyas y de Mayobamba, conquistó el reino chimú, e impulsó diversas expediciones navales. Sus incursiones a las regiones selváticas no tuvieron gran éxito y tuvo que abandonarlas ante las revueltas de los indígenas de la cuenca del lago Titicaca. Una vez sofocada la rebelión, marchó al sur, llegó hasta Tucumán y consolidó sus posesiones en la costa. Cuando su padre abdicó en su favor, en 1471, puso de manifiesto su voluntad de asentar la estructura imperial creada por Pachacuti, extender la influencia de la cultura inca a los pueblos vecinos, y llevó a cabo la ampliación de la fortaleza de Sucsahuamán. Falleció en Chinchero. Le sucedió su hijo Huayna Cápac.