Sevilla (España), 18 sep (EFE).- El bailaor flamenco Juan Manuel Fernández Montoya, "Farruquito", de 23 años, se casó hoy ante un millar de invitados con todos los ritos propios de las bodas gitanas, menos de dos meses después de que fuera condenado por un tribunal por atropellar mortalmente a un hombre.
La boda de "Farruquito" y Rosario Alcántara tuvo lugar en la iglesia del Cristo de los Gitanos de Sevilla, en el sur de España, cuyos alrededores fueron ocupados por miles de seguidores del artista, tanto payos (blancos) como gitanos, desde cuatro horas antes.
El joven bailaor, uno de los más conocidos internacionalmente, ha sido el centro de una gran polémica en España debido a que consiguió eludir la cárcel pese a que en 2003 atropelló con su coche a un peatón que cruzaba la calle y se dio a la fuga.
"Farruquito", que manejaba su auto sin licencia de conducir, se desentendió de la víctima y, cuando fue descubierto, hizo creer a la policía que quien llevaba el coche era uno de sus hermanos, menor de edad.
Un tribunal le impuso en julio pasado dos condenas de 8 meses de cárcel por dichos sucesos, lejos de los cuatro años y un mes que pidió el fiscal para él, por lo que no tuvo que ingresar en prisión.
Pilar Heredia, presidenta de la asociación gitana Yerba Buena e invitada a la boda, explicó a EFE que uno de los rituales que cumplirá la novia será la "prueba del pañuelo" para comprobar su virginidad, tras lo cual la mancha de sangre se mostrará a la familia y los novios serán vitoreados por los invitados.
El bailaor llegó a la iglesia con media hora de antelación, en un coche tirado por cuatro caballos y vestido de blanco hasta los zapatos, con un traje de época de tejido de Damasco y una blusa con puntillas.
Iba acompañado por su tía, la bailaora Pilar Montoya "La Faraona", que sustituyó como madrina a la madre del artista, "La Farruca", dada su reciente viudedad, y que también iba vestida de blanco con un traje de cola.
Durante la media hora que esperó a la novia a las puertas del templo, "Farruquito", muy sonriente, salió varias veces a saludar y tiró besos a sus admiradores, que le gritaban "guapo", le aplaudían y le daban vivas, desbordando el cordón de seguridad privada contratada por los contrayentes.
La novia llegó dos minutos antes de la hora prevista, en un coche de caballos, ataviada con una enorme corona en la cabeza, que sujetaba el velo que le cubría la cara y un traje en el que llamaba la atención el cuerpo con piezas en relieve.
Al llegar a las puertas de la iglesia, los hermanos de "Farruquito" cantaron para ella y le tocaron las palmas.
El banquete posterior, al que estaban invitadas 1.500 personas, fue organizado en una finca campestre de los alrededores de Sevilla.
En la misa que acompañó a la boda, según Pilar Heredia, cantaron Remedios Amaya, Montse Cortés y "Parrita".
El padrino fue el padre de la novia y, como "damitas de honor", actuaron varias niñas de corta edad, todas ellas vestidas con trajes de princesa de color celeste, con cola y coronas en la cabeza. EFE
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