Los Ángeles. El idilio del año entre los actores Tom Cruise y la española Penélope Cruz va tomando forma con el próximo estreno de Vanilla Sky , película en la que ambos se conocieron y cuya promoción está cobrando algo de su intimidad.
Ambos mantuvieron su amor en silencio hasta julio pasado, cuando fueron sorprendidos en una romántica cena en Los Ángeles y, desde entonces, sus apariciones juntos se pueden contar con los dedos de una mano.
"Mi vida personal no está para vender periódicos", asegura Tom Cruise desde las páginas de la revista Vanity Fair , en el número del próximo enero.
"Pensé: Dios mío, soy tu novio y tú eres mi novia... Cruise y Cruz", dice en la entrevista el actor, permitiéndose él mismo el lujo de hacer juegos de palabras con los apellidos de ambos.
El artículo describe con cariño ese momento "extraño y con la guardia baja" cuando nació el amor.
También compara a la actriz madrileña con la legendaria Audrey Hepburn, describiendo a su nuevo amor como "alguien que invita, increíblemente romántica".
"Déjame que te diga. España es genial", dijo Cruise en otra ocasión, extendiendo su amor hacia un país que ya conocía antes de encontrarse con Cruz, después de haber vivido allí durante el rodaje de Los otros , película del cineasta español Alejandro Amenábar, en la que es productor y que protagonizó su exesposa, Nicole Kidman.
A pesar de su celosa defensa de la intimidad, Cruise ha acompañado la promoción de sus nueva película con palabras de matrimonio, aunque solo sea para señalar, como dijo en una entrevista por televisión, que no tiene pensado casarse de nuevo o tener hijos.
Cruz, más conocida en Hollywood con la abreviatura de Pe , tampoco se ha quedado atrás confirmando en una publicación que "el dicho de que la cara es el espejo del alma es un tópico real" que demuestra cómo su amor contribuye a su actual belleza.