EscucharStanley Yelnats en un joven poco común. Su nombre es un palíndromo, o sea: se lee igual de izquierda a derecha que de derecha a izquierda, y lo persigue una maldición que cae sobre su familia. Así lo vemos en una bien lograda película juvenil: El misterio de los excavadores (2003).
Esa película tiene a su haber el nombre del director Andrew Davis, quien se mantiene por habernos dado una de las mejores cintas de acción de los últimos años: El fugitivo (1993), y cuenta con la actuación del joven Shia LaBeouf como Stanley Yelnats.
También aparece una bullanguera pandilla de chavalillos metida en un campamento correccional, por lo que predominan los actores jóvenes, quienes trabajan junto a la actriz Sigourney Weaver, como la directora del campamento, y Jon Voight como el temible "Míster Sir".
Lo cierto es que la desgracia de la maldición familiar le llega a Stanley por estar siempre en el lugar donde no debe estar y en el instante equivocado, sobre todo el día en que le caen encima unos zapatos para el baloncesto de un jugador famoso. De ahí al campamento.
En el campamento solo los ponen a hacer huecos en un desierto que antes era una enorme laguna, donde no llueve. ¿Por qué la directora es más terca que una mula al poner a los muchachos a hacer hoyos, hoyos y más hoyos, siempre hoyos? ¿Cuál es el misterio?
¿Qué tiene que ver eso con una vieja historia de amor y con un riachuelo para tomar fuerzas? ¿Qué tiene que ver el amor con un chancho como prenda romántica? ¿Por qué, por culpa del cerdo, la venganza aparece y se alarga como maldición?
¿Qué tiene que ver todo eso con una mujer bandolera, antes maestra de escuela, que asalta y besa a los hombres que mata, eso sí: luego de que los mata? Hay más interrogantes, extrañas, pero las respuestas se juntan para dar esta película agradable por entretenida.
El pasado siempre se mezcla con el presente, va y viene, para hacer más ágil la narración de este filme basado en una exitosa novela juvenil del escritor Louis Nachar titulada Hoyos. Película amena, para ver en barra.
Cómo, cuándo, dónde...:
El misterio de los excavadores se exhibe en Variedades, San Pedro, Cariari, Cinépolis.
Entrada: De ¢1.200 a ¢1.500, según la sala. Precio especial en funciones vespertinas y para pensionados.
Horario: Funciones regulares.
