Roma (AP). Amigos y admiradores de Luciano Pavarotti se unieron al luto y a las muestras de afecto de todo el mundo por el fallecimiento del tenor italiano, ocurrido el jueves.
La pera Estatal de Viena izó una bandera negra y Módena, ciudad natal del tenor, en el norte de Italia, informó que pondría el nombre de Pavarotti al teatro municipal.
Medios noticiosos y sitios de Internet en todo el mundo, desde Israel hasta Estados Unidos, pasando por Europa y América Latina, encabezaron sus informaciones con la noticia del deceso.
Numerosas radiodifusoras transmitieron sus célebres grabaciones.
El mundo entero estará escuchando hoy su voz en cada radiodifusora y canal de televisión, y esto continuará. Ese será su legado y no terminará jamás, dijo el director de la Orquesta Filarmónica de Israel Zubin Mehta, quien dirigió a Pavarotti en Roma y Los Angeles durante los conciertos de Los Tres Tenores, con Plácido Domingo y José Carreras.
Siempre le admiré esa voz gloriosa, un don de Dios; ese timbre inconfundible y especial desde las notas bajas hasta las más altas en la gama de un tenor, dijo Domingo en un comunicado desde Los Angeles. Rompieron el molde después de hacer a Luciano. Será recordado siempre como un cantante único en los anales de la música clásica.
Carreras, por su parte, expresó que recordaría a Pavarotti como uno de los tenores más importantes de todos los tiempos.
Tenemos que recordarlo como el gran artista que fue, el hombre con esa personalidad maravillosamente carismática, un muy buen amigo y un fabuloso jugador de póker, dijo Carreras, según el diario sueco Expressen.
Pavarotti falleció la madrugada del jueves en su residencia de Módena tras luchar contra un cáncer de páncreas desde el año pasado, informó en un comunicado su representante Terri Robson.
El mundo ha perdido a un gran tenor, pero yo he perdido a un gran amigo, a un hermano, lamentó Mirella Freni, una grande de la ópera y amiga de la infancia de Pavarotti, en declaraciones a The Associated Press. Crecimos juntos, estudiamos canto y Dios nos bendijo con carreras maravillosas. He perdido a mi hermano.
Por su parte, la soprano española Montserrat Caballé, gran amiga del tenor, lo recordó no sólo por su talento, sino como un ser de gran bondad.
Se le conoce por su do de pecho, pero su corazón era más grande que su voz, declaró Caballé a Europa Press. El hacía acciones (como crear una Fundación contra el Sida, hogares para niños en diferentes rincones del planeta o la Casa de los Ancianos en San Francisco), pero no lo decía ni buscaba fotografías.
El cantante y activista Bono, líder de la banda de rock irlandesa U2, y quien llegó a cantar con Pavarotti, expresó que él vivía lo que cantaba, su ópera era una fusión de alegría y tristeza; a la vez surrealista y terrena. Aun cuando su voz perdió potencia, su habilidad interpretativa lo siguió proyectando como un gigante en medio de un puñado de grandes de la música.
El ministro de Cultura de Italia, Francesco Rutelli, coincidió en que era un gigante del siglo XX.
La gran extensión de su voz y su inusual sentido dramático hicieron inolvidables la música y lírica de compositores italianos, dijo Rutelli.
Hoy nos hemos quedado sin Luciano Pavarotti, uno de los últimos tenores más famosos de la ópera, no sólo por su excepcional talento sino también por su compasión y su fuerte compromiso social, declaró el presidente de la Comisión Europea José Manuel Barroso.
La soprano Renee Fleming, quien se preparaba para una actuación en Matsumoto, Japón, recordó haber cantado con Pavarotti durante una transmisión televisiva en el Lincoln Center.
El tuvo la técnica más perfecta en la historia de la música grabada, dijo Fleming en un correo electrónico enviado a la AP. Capturó también los corazones del público más numeroso en una forma con la que sólo rivalizó Enrico Caruso en el siglo XX.
Con una voz clara y centelleante Pavarotti está entre los cinco grandes tenores, opinó el viernes Josep Pons, director titular de la Orquesta y Coro Nacionales de España (OCNE), según Europa Press.
En Argentina, la voz de Pavarotti resonaba en la televisión bajo titulares como Adiós, Luciano y Lloran por Pavarotti, mientras los noticieros transmitían imágenes de los conciertos que ofreció allí el tenor, incluido el de 1999 junto a la cantante folklórica Mercedes Sosa.
El diario Clarín lamentó el deceso del cantante lírico más popular de la segunda mitad del siglo XX y La Nación alabó sus destacadas actuaciones en todos los grandes teatros del mundo, entre ellos el Colón de Buenos Aires, donde debutó con La BohŠme en 1987.
En Cuba, la emisora Radio Rebelde dio a conocer la triste noticia y dijo que el reconocido artista italiano gozaba también de gran popularidad entre el público de la isla, donde su labor fue ampliamente divulgada por la televisión, radio y prensa especializada.