Washington (EFE). El análisis de un diente fosilizado, que se halló en la República de Altai, mostró que un perro domesticado que vivió hace unos 30.000 años tenía mucho más de perro moderno que de lobo, según un artículo publicado en Public Library of Sciences (PLoS) .
El origen de los perros domésticos sigue siendo materia de controversia entre los científicos que, hasta ahora, tienen datos que indican una separación entre el perro moderno y los lobos al final del período pleistoceno tardío.
Un equipo encabezado por Anna Druzhkova, del Instituto de Biología Molecular y Celular de la Federación Rusa, en la cual se encuentra Altai, analizó el ácido desoxirribonucleico tomado de un diente que perteneció a uno de los ancestros más antiguos conocidos del perro moderno.
“ La domesticación de los perros a partir del lobo gris es un proceso que se ha aceptado en general. Los registros arqueológicos proporcionan restos inequívocos de perros que datan de hace unos 14.000 años”, dice el artículo.
La domesticación humana de los perros es anterior al comienzo de la agricultura hace unos 10.000 años, pero no se ha determinado cuándo es que los perros emergieron como una especie diferente de los lobos.
Aunque algunos estudios han indicado que esta separación ocurrió hace unos 100.000 años, los fósiles más antiguos conocidos hasta ahora de perros modernos datan de apenas unos 36.000 años.