El cantante mexicano Alejandro Fernández ofreció, el martes, un espectacular concierto en la capital panameña deleitando a su público, principalmente mujeres, con temas de la música tradicional mexicana y baladas románticas.
El Potrillo, como se le llama popularmente, cantó por dos horas y media, acompañado de una orquesta mariachi, un espectacular juego de luces y tres pantallas que se intercalaban para ilustrar las canciones y mostrar la actuación del cantante sobre el escenario.
Vestido de charro mexicano, el artista recordó rancheras clásicas e interpretó temas de sus discos recientes.
Con la popular canción ranchera Son de la Negra, y las pantallas mostrando imágenes de flores coloridas, combinadas artísticamente con las luces, Fernández dio inicio a la velada.
El cantante rindió homenaje a los clásicos cantantes de la música mexicana como Pedro Infante y Jorge Negrete cuyas imágenes aparecían en las pantallas.
Abrázame, Mátalas, Nube viajera, Nací para amarte, Quisiera, Sin tantita pena y Loco figuraron entre la treintena de canciones que interpretó para un público que se deleitaba y cantaba con él.
También interpretó temas de Agustín Lara. "Vamos a recordar a uno de nuestros mejores compositores, tres canciones maravillosas", dijo el artista antes de interpretar Noche de ronda, Solamente una vez y Granada, que arrancaron aplausos.
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