ColaboradorEl mundo de la moda perdió a una de sus agujas más prestigiosas. El empresario y diseñador español Jesús del Pozo, falleció ayer en Madrid a los 64 años de edad, a causa de un problema pulmonar.
“Dedicó toda su vida a la que fue su vocación: la moda. Aunque hoy nos ha dejado, su legado sigue vivo a través de su marca”, expresó su familia vía Twitter, según informó el diario español La Vanguardia .
Modesto Lomba, presidente de la Asociación de Creadores de Modas de España, dijo que aunque Del Pozo se veía débil en meses recientes, seguía trabajando con entrega hasta sus últimos días.
“Debemos reconocer que él fue uno de los instigadores de la actual era de la moda en España. Él hizo posible la realidad en la que el resto de nosotros vivimos actualmente”, dijo Lomboa.
Los principales diarios españoles lamentaron el deceso del creador, nacido en 1946, y alabaron su legado. El País, por ejemplo, lo catalogó como “el diseñador que definió el nuevo estilo de un país que se acababa de despertar a la democracia (después de la Guerra Civil)”.
Asimismo, el fallecimiento de del Pozo cambiará los planes de la próxima edición de Cibeles Madrid Fashion Week, una cita que ya planea rendirle un sentido homenaje, tal y como anunció la Asociación de Creadores de Moda (ACME). En el festival se presentará su colección primavera-verano 2012.
Legado perenne. Durante las últimas tres décadas, Jesús del Pozo estuvo considerado como uno de los más importantes y personales diseñadores españoles.
Entre sus logros sobresale ser el primer diseñador de moda en recibir la Medalla de Oro al Mérito de las Bellas Artes, en 1998. También obtuvo el Premio Nacional Cristóbal Balenciaga, en 1989, y la Aguja de Oro, en 1981.
Jesús del Pozo estudió Arquitectura de Interiores e Ingeniería Industrial y de Diseño de muebles. Tras graduarse, laboró en unos establecimientos de cestería y bambú que poseía su familia.
Para replantearse su futuro profesional, viajó durante dos años por Alemania, Grecia, Turquía y Gran Bretaña.
A comienzos de los 70, pasó siete meses en Alemania, donde influirían en él una serie de movimientos pictóricos y musicales.
En 1974 se adentró en el mundo de la moda y abrió una tienda de ropa para hombre en la madrileña calle del Almirante, centro de la moda española. Dos años más tarde presentó su primera colección de ropa masculina en París.
El modisto fue el creador de los uniformes para el Pabellón de España y sus Autonomías en la Exposición Universal de Sevilla en 1992, de los voluntarios de la Cruz Roja Española y del personal de largo recorrido de la empresa ferroviaria Renfe.
Después de participar en varias ediciones de la Pasarela Cibeles, de Madrid, en enero de 1999 Jesús del Pozo, junto a los también llamados “diseñadores disidentes”, protagonizó una rebelión que desembocó en su ruptura con el certamen, al no estar de acuerdo con el modo en que se desarrollaba.
Para ello, crearon la Asociación de Creadores de Moda de España, que nació con el objetivo de defender los intereses del sector textil.
Mediante un comunicado de prensa, la familia del diseñador informó de que el fallecimiento de del Pozo no implicará la desaparición de su legado, que seguirá vivo “a través de su marca y un equipo de profesionales que han sido formados por él mismo”.