EscucharA las 7 a.m. de ayer el vicepresidente de la República (1982-1986) Alberto Fait Lizano, de 68 años, falleció en su casa de habitación, en San Pedro de Montes de Oca, tras un año desde que se le detectó un tumor maligno en el páncreas.
Ingeniero, empresario y político, murió en brazos de su esposa, Ana Teresa Pacheco. La familia cumplió su deseo de que se le incinerara y esparcieran sus restos en playas del Coco y Cervantes de Paraíso de Cartago.
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En setiembre del año anterior, Alberto Fait --entre Guillermo Constenla (al fondo) e Isabel Irola--, todavía como jefe de campaña de José Miguel Corrales (derecha), hizo su última aparición pública dentro de la política. Luego renunció a ese puesto, pero colaboró con el aspirante presidencial hasta el domingo último.
"Lo abracé y besé. Le dije que todo estaría bien y cerró los ojos y así quedó...", comentó su esposa.
Al medio día de hoy se realizará un acto de recordación en la capilla Don Bosco.
El Consejo de Gobierno, reunido ayer en Zapote, declaró un minuto de silencio en su sesión, en homenaje del exvicepresidente, manifestó el ministro de Información, Alejandro Soto. Igual acto se realizó en el plenario de la Asamblea Legislativa en horas de la tarde.
El presidente del comité ejecutivo del PLN, Rolando Araya Monge, se mostró afectado por la desaparición de su compañero.
"Sabíamos de su enfermedad, pero no esperábamos esa noticia tan pronto", dijo al describir los sentimientos de los miembros del comité político verdiblanco que se dieron cita ayer en la sede liberacionista del Balcón Verde.
Vida política
El ingresó a la vida pública a la par de Luis Alberto Monge durante el proceso electoral de 1978. Cuatro años más tarde, asumió la jefatura de campaña del PLN y fue designado candidato a vicepresidente de la República.
Entre 1986 y 1990 ocupó una curul en la Asamblea Legislativa. En ese período formó parte de la comisión legislativa que investigó el narcotráfico, junto a los liberacionistas José Miguel Corrales, Jorge Rossi y los socialcristianos Luis Fishman, Luis Manuel Chacón y Oscar Avila.
Pretendió ser candidato presidencial del PLN en el proceso electoral de 1986 y 1990. En marzo de 1993 se mostró inclinado por aspirar a ese cargo, pero se retiró al poco tiempo.
Mantuvo hasta los últimas horas de su vida la pasión por la política pues según narraron sus familiares, el domingo a las 10 p.m. preguntó por el resultado de las mesas de votación de la convención del Partido Liberación Nacional (PLN).
Sus últimas apariciones públicas las hizo junto a José Miguel Corrales, hoy candidato presidencial liberacionista, quien venció el fin de semana anterior a Wálter Coto, en la convención interna de la agrupación.
Gerardo Fait, uno de los cinco hijos del político --los otros son Alberto, Anabella, Sergio y Andrés-- explicó que su padre pidió que no lo velaran en la Asamblea Legislativa pues no era de su agrado. "El quería un sepelio modesto", explicó.
Guillermo Robles Arias, concuño de Fait, no escondió la especial inclinación que tenía por la naturaleza. "Su cuarto lo tenía lleno de paisajes que capturó él mismo en fotografías", dijo.
Colaboraron Marianela Jiménez y Rónald Matute, periodistas de La Nación. In illo tempore
In illo tempore
Hablaron de lo que compartieron en aquel tiempo (in illo témpore). Amigos y adversarios exaltaron la figura de Alberto Fait. Algunos de los comentarios fueron:
- Alejandro Soto, ministro de Información: "Fue un insigne constructor de esta Costa Rica y colaborador de la Costa Rica del mañana. El contribuyó permanentemente con ideas y hechos en la construcción de este país..."
- Rolando Araya, presidente del PLN: "Sentimos que perdimos un líder, un extraordinario pensador, una mente brillante y un extraordinario analista."
- Guillermo Robles, concuño: "Como vicepresidente mostró sus cualidades y perspectivas para solucionar los problemas de Costa Rica."
- Jorge Rossi, exdiputado: "Me duele mucho. Fue un buen ciudadano; como miembro de la administración de Luis Alberto Monge le hizo mucho bien al país. De gran valor cívico, democrático y político."
- José Antonio Lobo, diputado de oposición: "Es un dolor para el país; es una lástima para Costa Rica que Dios llamara a don Alberto. Era sencillo coincidir con él en lo sustantivo, compartir preocupaciones y hacer cosas para mejorar positivamente la situación."
