(actualiza con detalles acusación, fiscal y exilio)
Miami (EEUU), 21 ago (EFE).- Las autoridades estadounidenses acusaron hoy a un general de Brigada y a dos pilotos de Cuba por el derribo en 1996 de dos avionetas de una organización de exiliados de la isla en Miami.
El general Rubén Martínez Puente, quien lideraba la Fuerza Aérea de Cuba, y los hermanos Lorenzo Alberto y Francisco Pérez Pérez, pilotos de cazas MiG, fueron acusados de conspirar para asesinar a estadounidenses, de asesinato y de destrucción de aviones, según los documentos consignados hoy en un tribunal de Miami (Florida).
En el siniestro murieron los pilotos Armando Alejandre, Carlos Costa, Mario de la Peña y Pablo Morales, tres de ellos estadounidenses.
La acusación se presentó semanas después de que grupos del exilio y legisladores cubanos americanos advirtieran al presidente de EEUU, George W, Bush, que podría perder el importante voto de esta comunidad en las elecciones generales de 2004 si no adoptaba una política más dura hacia La Habana.
Asimismo, coincidió con el anuncio oficial de hoy de que Radio y TV Martí, la emisora creada por el gobierno de EEUU para transmitir hacia Cuba, enviará informaciones hacia la isla "casi imposibles de interferir" al utilizar un satélite de la empresa mixta española Hispasat.
El derribo de las avionetas ocurrió el 24 de febrero de 1996 cuando dos aparatos de "Hermanos al Rescate" fueron derribados en espacio aéreo internacional, según una investigación de la ONU.
El gobierno cubano ha asegurado que los aparatos se habían adentrado en el espacio aéreo cubano.
Miembros de "Hermanos al Rescate" han solicitado que el presidente cubano, Fidel Castro, también sea encausado por considerarlo el "principal responsable del asesinato de nuestros compatriotas".
"El es quien ordenó el derribo de las avionetas y eso está bien documentado", expresó José Basulto, presidente de la organización quien calificó la acusación como un "paso en la dirección correcta".
Ese grupo sostiene además que Estados Unidos tuvo responsabilidad en el incidente y ha condenado la conducta de Washington respecto a los presuntos culpables de la acción.
Entretanto, el gobernador del estado de la Florida, Jeb Bush, calificó la decisión como un "acto de justicia y refleja la continua dedicación del Gobierno del Presidente (de EEUU George W) Bush hacia el pueblo de Cuba".
"Estos pilotos, mientras que estaban sobre aguas internacionales, asesinaron a tres ciudadanos americanos y un residente permanente de EEUU", agregó en un comunicado Bush, hermano menor del presidente de Estados Unidos.
"Mis pensamientos y oraciones están con las familias y los amigos de las víctimas, que con dignidad y paciencia, han esperado este resultado", añadió.
Por su parte, el presidente de la Fundación Nacional Cubano Americana (FNCA), José "Pepé" Hernández, dijo que la acusación es el resultado de la labor que ha realizado el exilio para llevar ante la justicia a Castro y a sus funcionarios.
"Había que mantener la presión y como resultado de esto, en el día de hoy se comenzó el encausamiento de los criminales que cometieron ese delito", manifestó Hernández.
El Consejo por la Libertad de Cuba (CCL) manifestó en un comunicado que "esta importante decisión envía un serio mensaje al régimen castrista de que no tendrá impunidad por su crimen".
"Y que el Presidente (de EEUU) está cumpliendo con su compromiso de ayudar a que la libertad y la democracia lleguen a Cuba", añadió.
El CCL indicó que la acusación de los tres cubanos forma parte de las recomendaciones que ese grupo hizo recientemente al mandatario estadounidense. EFE
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