La identificación de siete esqueletos descubiertos en una fosa común en Vallegrande, entre los que se cree que está el de Ernesto Che Guevara, demandará una semana, dijeron ayer fuentes allegadas a las excavaciones.
Sin embargo, las coincidencias históricas y los estudios científicos conducen a asegurar que el mítico guerrillero está en la fosa común descubierta el pasado 28 de junio.
La fuente, que solicitó el anonimato, afirmó que la exhumación de los restos, aglomerados en una fosa en el lado derecho de la pista de aterrizaje de Vallegrande, podría durar hasta cuatro días, y la identificación, una semana más.
Aunque los técnicos cubanos y argentinos rehusaron comentar si entre los restos se encuentra el esqueleto del Che, cuya columna de siete hombres (él incluido) fue ultimada en la Quebrada del Yuro, el 8 de octubre de 1967, las esperanzas de que así sea se acrecientan.
Existen datos de que algunos restos de vestimentas, que a pesar del tiempo se conservan con los huesos, corresponden al legendario guerrillero.
En las últimas fotografías tomadas al Che en la lavandería del hospital donde fue expuesto su cadáver, se nota que vestía chamarra verde, que una manga está fuera del brazo y la otra puesta, que su pantalón llevaba cinturón y que estaba descalzo.
Una de las osamentas encontradas en la fosa colectiva, la número dos, tiene las mismas características porque conserva el cinturón, que está roto, la chamarra todavía puesta en un solo brazo (el izquierdo), no tiene zapatos como otros cadáveres y el otro brazo está fuera de la chamarra.
Los antropólogos aún no han descubierto el cráneo de dicho esqueleto, al que le faltan las manos (al Che le fueron cortadas por el ejército, y actualmente están en Cuba).
Lo que se conservó en el esqueleto solo es la chamarra y el cinturón. El pantalón se perdió con el tiempo. Aunque también apareció otro esqueleto con chamarra, aparentemente celeste. Los otros restos tienen partes de tela, probablemente de poleras y medias.