Para Josh no es una llamada sencilla. Hace menos de 24 horas la NBC anunció que 1600 Penn no sería renovada para una segunda temporada y ahora debe atender a medios de toda Latinoamérica para promover, precisamente, ese programa.
La decisión de la televisora no sorprendió a nadie, ni siquiera al propio Josh, actor, productor y cocreador del show que nos invita a seguir las desventuras de una familia disfuncional en el más protocolario de los escenarios: la Casa Blanca: “Todos sabemos cómo funciona esto, son razones prácticas, tuvimos que luchar por un buen rating pero nos quedamos cortos, imaginate que otros 10 programas también fueron cancelados esta semana”. La ley de los números no miente, 1600 Penn se estrenó en diciembre del 2012 frente a 7 millones de espectadores en EE. UU.; tres meses después su último episodio cautivó a menos de 2... NBC no podía apoyar más el proyecto.
Gad, sin embargo, saca pecho, y defiende la obra con el cariño de un padre orgulloso. “No logramos llegar a la audiencia deseada, pero el apoyo de los fans ha sido tremendo. Tras el anuncio de la cancelación fuimos trending topic (“tema del momento”) en Twitter... Creo que hacia el final habíamos construido algo muy interesante pero no nos alcanzó el tiempo para llevarlo hasta donde habríamos querido”. Su voz es convincente, Josh realmente piensa que el show tenía estrella y por eso no se desanima: “Nunca es realmente el final, ahora con Netflix y Hulu por ejemplo, mira lo que sucedió con Arrested Development , tal vez algún día tengamos una reunión”, dice.
No es una idea descabellada, aunque sí algo optimista. 1600 Penn dista de tener el típico perfil “de culto” propio de series como Arrested Development o Veronica Mars , recientemente “resucitada” por sus fanáticos en Kickstarter. Al contrario, este es, para todos los efectos, un show familiar, una comedia ligera y de espíritu noble para ver a sillón lleno. El mismo Gad rescata este elemento como la mayor de sus satisfacciones: “La mejor recompensa que uno puede pedir es que la familia completa disfrute del programa y eso fue lo que sucedió. Creamos un show desde el corazón, para una audiencia familiar, queríamos alejarnos de la programación orientada al típico joven cínico que apenas vuelve a ver el televisor un par de veces mientras sigue sentado frente a la computadora”.
Escucho a Josh al teléfono y no puedo evitar una sonrisa cómplice: está describiendo a un segmento de la población del que formo parte. Tal vez por eso no me cautivó 1600 Penn y tal vez por eso solo puedo recomendarla a quien quiera sentarse con los abuelos y los niños a compartir un sano rato de televisión en familia, pero hasta ahí. El programa no propone nada más allá de la típica lección del valor de los lazos familiares que, ciertamente, nunca está de más.
No hay mal que por bien no venga
A lo largo de la conversación Josh repasa algunos de sus anteriores trabajos y comparte a cuentagotas información de sus futuros proyectos. Cuando empieza a sonar como mucho con demasiado para un solo tipo se permite un poco de humor “tal vez la cancelación de 1600 Penn llega en un buen momento, no sé si habría podido manejar tanto al mismo tiempo”.
Lleva razón. Si bien su Wikipedia todavía se lee completo sin necesidad de tocar el mouse, no es de extrañar que su agenda para el 2013 esté topada; el comediante acumula una seguidilla de éxitos “menores” que sumados uno sobre el otro meten miedo y despiertan la envidia de cualquiera que quiera ser cualquiera en la industria. Apenas se dio a conocer “en serio” en la pantalla chica en el 2007 gracias a Back to you (FOX), y de ahí armó trampolín para fichar como corresponsal del Daily Show con Jon Stewart (Comedy Central) y más adelante como actor invitado en Bored to Death (HBO), Modern Family (ABC) y New Girl (FOX).
Entre tanto, tanteó suerte en el cine con papeles secundarios en 21 y Love & Other Drugs y protagónicos en The Rocker y She Wants Me . Sin embargo, ninguno de estos roles fue gran cosa a la par del éxito que alcanzaría en Broadway, gracias a su trabajo en el musical The Book of Mormon , una exitosísima sátira religiosa ideada por Trey Parker, Matt Stone (creadores de South Park ) y Robert López. Su interpretación de Elder Cunningham le valió una nominación al premio Tony y la atención de todo Hollywood...
Preparándose para el último gran salto
A sus 32 años Josh Gad tiene hambre de grandes ligas. “Este año tengo tres estrenos importantes, también estoy trabajando en un guion para una secuela de Twins y en un filme animado de Disney”. Sí, se refiere a una segunda parte para aquella inolvidable película del 88 esteralizada por Arnold Schwarzenegger y Danny DeVito. Yo estaba tan sorprendido como usted pero tras un rápido reporteo digital pude confirmar que ambos repetirán su papel y que en esta ocasión se les unirá Eddie Murphy como el tercer hermano perdido... En efecto, suena como un potencial desastre pero nos tocará apreciarla cuando salga por su factor nostálgico. Igual, la primera tampoco fue gran cosa.
Volvamos a Gad. ¿A cuales estrenos para este año aludía? Primero a The Internship , donde acompañará a Vince Vaughn y Owen Wilson (enormes en Wedding Crashers ), luego a Thanks for Sharing (con Mark Ruffalo y Gwyneth Paltrow) y finalmente a jOBS , la cinta independiente que relata la vida de Steve Jobs (encarnado por Ashton Kutcher) y para la cual Gad tuvo la responsabilidad de no decepcionar a todos los geeks del mundo en el papel de Steve Wozniak, cofundador de Apple adorado por quienes conocen la historia de la gran manzana desde sus orígenes. ¿El resultado? Está por verse... tras su estreno en el festival de Sundance se decidió “congelar” su presentación al gran público.
Por lo pronto Gad no pierde el tiempo. Solo días después de atendernos fue anunciado por Zach Braff (JD en Scrubs ) como parte del elenco de Wish I Was Here , cinta que el propio Braff coescribió y que ahora interpretará y dirigirá gracias al apoyo de sus seguidores en... sí, adivinó bien: Kickstarter. ¿Será que la misma plataforma rescata 1600 Penn ?
Si me lo pregunta a mí, está difícil, pero la última palabra la tiene usted. Si tiene suscripción de Hulu puede hacer las mías y tirarse la maratón en un solo día, caso contrario sígale la pista a la serie cada miércoles en FOX y no deje de prestarle atención al trabajo de Gad; apenas arrancó y ya da mucho de qué hablar.